Alonso Vicent 4 de Septiembre de 2018
Lo más importante es saber lo que se quiere. Yo elegí los campos, el bosque y las piedras... esas que me dejaron ver con claridad todos los árboles que guardaban en sus grietas.
Has plasmado un enorme recorrido poniendo el alma en cada párrafo, compartiendo experiencias y voluntad. Recordé, en parte, un extenso relato que escribí como autoestímulo para cambiar de vida antes de los cuarenta... Y lo logré.
Lo que decía, querer es poder, pero hay que convencerse de lo que se quiere.
Encantado de descubrirte en este relato que debe tener continuidad.
Un abrazo, Catia, en plena tormenta por estas tierras (me gusta oírlas).