LUIS ANTONIO DE VILLENA

Hoy poeta madrileño, Luis Antonio de Villena, su reseña biográfica (extraída de http://www.poemas-del-alma.com/luis-antonio-de-villena.htm)
Luis Antonio de Villena es el nombre de un prolífico escritor nacido en Madrid, España, el 31 de octubre del año 1951. Ya desde sus estudios básicos se acercó especialmente a la poesía clásica grecolatina. Más tarde, obtuvo la licenciatura en Filología Románica y tomó lecciones de varios idiomas, incluyendo el inglés, el francés y el latín. Dentro del género ensayístico se ha especializado en la crítica literaria y también ha cultivado el periodismo de opinión. Por otro lado, ha antologado a diversos poetas, en muchos casos traduciendo él mismo sus obras. A diferencia de otros poetas, de Villena no escapa a los reflectores; por el contrario, tiene una constante presencia televisiva y radiofónica, y es un fuerte representante de la literatura homosexual española.
Se trata de un autor que ha ofrecido al mundo decenas de libros de varios géneros y que ha recibido una respuesta positiva tanto por parte de la crítica como de sus lectores. Destacan sus poemarios "El viaje a Bizancio", "La muerte únicamente" y "Marginados", su ensayo "El dandismo" y su híbrido de drama y narrativa titulado "Introducción a El rufián". Este es el poema que he seleccionado…

MAGIA DE VERANO

Me recreo ante tu cuerpo como ante un paisaje
imprevisto. Me sorprende verte en la desnudez juvenil,
y ansío recorrerlo, como una anhelada geografía.
Me ves pensando en la umbría vegetal de algunas
grutas, o en el agua del muslo donde brillan las venas.
Me perderé en un bosque que cruzo con mis manos,
y pediré una larga estepa donde los labios hablen.
Me ves sorprendido, anonadado, pensando en habitarte.
Y tú, mientras, te abandonas al cálido primor del aire.
Te dejas en la luz, que te navega; y si miro tus ojos
vuelvo al jardín oscuro donde es verano el verde.
Te miro otra vez y casi no te creo posible. Fulges,
encantas, guarda tu cuerpo el hechizo insabido de la tierra.
Y despacio sonríes al irme yo acercando, atónito,
hacia ti mientras el sol nos cubre con su luz, nos desdibuja,
y nos va metiendo en la calma inmensa y rubia de la tarde.

Luis Antonio de Villena​