Octubre.

Entre el ramaje tiene el viento placer ,
susurros suaves pero en un irregular
ritmo de fluído caracter melodioso.

Una ráfaga de lluvia no puede detenerse,
dura y suave como dagas entrecruzadas
para que mi cuerpo se estremezca de su lucha.

Un toque de sol me mantiene cálida durante
esos dias monótonos y grises , disfrutando de
los últimos rayos , hasta que espontáneo se
quedan dormidos.

Es octubre otra vez , la etapa con muchas
variaciones en colores , paisajes y toda
clase de fenómenos de otoño , que siempre
dejan deseos y me seducen otra vez.