Vamos al cielo a encontrar a Jesús

Vamos al cielo
a encontrar a Jesús
en cielos rosados y nubes violetas
y hay montañas divididas
por anchos ríos cristalinos
sobre ellos galopan multitudes de aves
con plumas sedosas de vivos colores
y ojos brillantes verdes y dorados.

Jesús se pasea por los verdozos y largos prados
de altos árboles gigantes que
cubren de sombra el paraiso
en diferentes rincones hay
grandes mansiones con altas formas
redondas y anchas, blancas y azules
mezcladas de piedras multicolores.

Sus puertas altas son de cristal
y oro brillante y por fuera
en las orillas ramilletes
de flores enredadas como marco.

También hay lagos grandes con aguas cristalinas
donde posan los blancos gansos tranquilos
al sonido que desprende el susurro del amor
que llena la presencia de Jesús
en su mirada de luz divina
en sus manos de paz y dicha
y en sus pasos que nos llevan
al nido de su cielo.

Vamos al cielo
a encontrar a Jesús
y darle los frutos de amor
para estar en su único
y sagrado corazón
en donde hay vida eterna
y se vive sin tiempo
sin años
sin edad.


Rosa Maria Reeder
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