La ira

No son las palabras
las que hieren,

son las formas libres
de desprecio,

la denigración
en todas las ramificaciones,

la desesperación
por escupir con bajeza,

no son las palabras
las que distorsionan,

son el entresijo aplastante
que en las neuronas habitan,

siendo la ira, la que ocasiona
la desintegración de la especie.

 

Dicen amiga que no hiere con sus palabras
quien quiere sino quien puede y siempre he pensado
que es verdad. Un beso, me alegro
de volver a reencontrarme con tu poesía.

 

Buenas letras dejas para reflexionar sobre ellas,
las palabras conllevan a más...
Ha sido un placer pasar por tus letras.
Besos. Tere

 

...Se dice que el tiempo de Dios es perfecto....Wow que maravilla!!!

 

Muchísimas gracias Dulcinista por pararte en mi espacio, este poema lo escribí y lo publiqué pero luego no podía seguir por falta de tiempo, y según me iban surgiendo las publicaba, me alegra te haya gustado, un abrazo

 

En realidad, tuve que volver a releer el poema porque muchas veces escribo y en el momento lo entiendo pero pasado los días, los años, tengo que reflexionar a ver que pasó por mi mente para llenar de letras el espacio y comprobar el sentido del mismo y haciendo uso de mi imaginación y un poco de realidad, he llegado a la conclusión que, no hace tanto daño las palabras como el daño escupido con rabia, siendo la ira, la rabia contenida llevada hasta los extremos, muchísimas gracias por pasarte por mi poema, un abrazo y muchos besitos

 

Si nos tomamos las cosas personales, es lo que hiere.