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Lo bueno de ser feliz.

Tema en 'Prosa: Obra maestra' comenzado por enrike, 25 de Enero de 2015. Respuestas: 0 | Visitas: 839

  1. enrike

    enrike Poeta recién llegado

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    Para Camilo es un día normal ir al trabajo; al salir tomar algo solo y dormir para mañana volver a repetirlo todo, claro está no siempre salir a tomar eso se puede cambiar por una película. Todo una rutina hasta la llegada de un mail de Paola su amiga de infancia ese amor de chiquillo que cada vez que la recuerda ríe y habla en voz alta para que se vaya ese pensamiento, porque mil veces le dijo te quiero y mil veces ella le dijo que no. No la veía desde los dieciséis años. Podemos vernos, que necesito verte es urgente disculpa por contactarme así pero te lo explico mañana, a las cinco en el bar a una cuadra de donde vivías decía el mail. Como corresponde Camilo se alisto pero sin parecer nervioso, llego puntual como nunca. Y ella ya estaba ahí, linda pero algo subida de peso. Hola le dijo me soprendio tu mail. Siéntate Camilo en verdad me da gusto verte, dicen que eres medico. Si lo soy pero egrese el año pasado, los demás, doctores aun me ven como practicante. Y tú has estada trabajando por aquí. No, no trabajo, y me case pero también me divorcie pero antes déjame pedir algo de tomar Camilo yo te invito, ok pero después yo. Dos horas de conversación de recordar el colegio, de risas. La noche caía y Camilo estaba feliz aunque sabiendo de su no muy bien resistencia al acohol, le dice a Paola que fue un gusto volver a verla acá tienes mi tarjeta son nuevas, cualquier cosa me llamas. Paola recibe la tarjeta, no necesito llamarte, necesito tu ayuda ahora Camilo, por favor préstame dinero tengo una deuda que me dejo el inútil de mi ex esposo, te lo devuelvo solo quiero doscientos dólares. A Camilo se le quita la sonrisa, y sabe que tanta cortesía tenía un fin. Siempre lo mismo Camilo siempre utlizado. No hay problema Pao acá tienes. Pero ojala vuelva a verte. Camilo se va, ella lo despide y ve como Camilo toma su taxi.

    Un mes paso desde ese día en el bar, Camilo no quiere pensar que su amiga lo ha timado. Hace memoria si le dio la tarjeta adecuada o por equivocación o borrachera le dio una tarjeta de un colega. Camilo piensa y piensa porque no llama le habrá pasado algo, volvió con el esposo o simplemente regresando a la idea original lo timo sin la mínima vergüenza. Bueno si es así que le aproveche dice Camilo en voz alta. A los cuatro día en pleno almuerzo recibe la llamada de Paola, hola Camilo disculpa por no llamarte antes pero tuve algunos inconvenientes pero ya paso, que dices si nos vemos hoy. Camilo con la mano a medio alzar le dice que sí, pero donde nos vemos. No se Camilo dime a qué hora sales del hospital. A las diez. Entonces paso por ti a esa hora, besos. Quince minutos antes de las diez Camilo está afuera del hospital esperando como quinceañera, ella llega en un taxi y lo llama, sube Cami que hace frio. En el auto Camilo ve que ella lleva un sobre de carta. Es tuyo Camilo es tu dinero, yo pago mis deudas me demoro pero pago. Ven a cenar conmigo a mi departamento Pao dice Camilo. Bien esperaba que lo dijeras. En el departamento solo al llegar a la puerta Camilo la besa, y ella le correspondió; durmieron juntos esa noche y la siguiente y la siguiente.

    Paola le cocinaba, y él la llenaba de mimos y le contaba las cosas que vivió en la universidad y la deuda que aun tiene con ella. El llegaba a las diez, cenaban, reían y después hacían el amor. Era feliz Camilo muchos te amo le dijo. Ella solo reía. Pero un día al llegar como siempre, ella no estaba se fue y también los ahorros que tenia debajo del velador. Al día siguiente en el trabajo recibió un mail de ella. Lo siento Cami pero no podemos estar juntos, aun amo a mi esposo gracias por todo, prometo devolverte tu dinero. Besos. Reír eso le quedaba, y pensar muchas veces porque le hizo eso, pero siempre llegando a la idea original que Pao lo timo.

    Un año después Paola lo llama, Camilo ya no esta tan entusiasmado como la primera vez, querrá más plata, no mejor no le contesto. Sale a almorzar, un día normal paciente por acá, una que otra operación. En la oficina la secretaria lo interrumpe le dice que hay una chica afuera que desa hablar con el. Camilo sabe quién es, y se llena de rabia y piensa esta se ha venido hasta acá por plata, nunca debí darle mi tarjeta. Dile que no estoy. Ella lo ha visto entrar doctor, bueno que entre y despues de diez minutos me llamas diciéndome me que necesitan urgente ok. Entendido doctor. Pao entra usa unos jean ajustados y una bluza roja muy corta. Hola doctor Murrieta dice con una pequeña risita. Hola Pao como has estado, se ve que te ha ido bien le dice con un tono serio invitándola que diga su motivo de su visita. Si Camilo estoy mucho mejor, debo agradecerte por el apoyo que me diste. Camilo la mira y sabe que si no es él quien dice algo ella no lo hara, entonces creo que esta visita es para que me devuelvas mi dinero. Pao cambia las facciones y rie disforzadamente. De eso vine hablar Camilo sabes tuve muchos gastos pero te los devolveré solo ten paciencia eres doctor el dinero no te hace mucha falta como a mí. Claro que si Pao dice Camilo casi gritando, tengo la deuda del banco y del departamento donde vivo y tú te robaste mi dinero Pao pero bueno exijo que me pages. Mutis ella solo lo mira unos instante y se dirige a la puerta, dime sigues viviendo donde siempre Camilo y hoy mismo te lo dejo en tu casa y ya no me veras. Suena el teléfono es la secretaria. Camilo no lo atiende mira a Paola, no ahora estoy en la calle Sauces 364 segundo piso llego a las diez. Te veo ahí con mi dinero. Adiós Camilo estas bien guapo. Hola, lo necesitan de urgencia doctor, dice la secretaria.

    Camilo está en su departamento solo como siempre esperando encontrarse con Pao afuera de su puerta pero nada. Son las once y Camilo solo ríe soy un imbecil. Once y media y tocan la puerta se levanta del mueble abre la puerta, hola Camilo te hice esperar, mi dinero Pao mañana tengo que madrugar grito Camilo. Déjame pasar y te lo doy. Al entrar Pao sujeta de los hombros a Camilo y lo besa con una furia que asusta. Lo besa le toca, Camilo despierta totalmente solo atina a separar su cuerpo de ella pero Pao va un paso más. Lo acaricia y lo siente duro. Te gusta verdad Camilo, me deseas, sé que me deseas siempre lo he sabido, hoy seré tu mujer de nuevo. De nuevo se pregunta Camilo, que es esto un juego, largo Pao, o hago que te saquen. Paola rie juega con sus manos, y besa de nuevo a Camilo, ves que no te resiste donde esta tu cama. Camilo se queda helado viendo como Paola se pone a husmear en su departamento como invade su privacidad. Acá esta Camilo lo encontré ven que hoy no dormirás solo. Camilo va, aunque lo que dijo es verdad el siempre la deseo. Pero él es el doctor Camilo Murrieta Carrasco, lárgate Pao o me olvido que eres mujer que fuimos amigos. Pao esta desnuda en su habitación mirándolo, Camilo se queda con la palabra amigos entre los labios. Paola se acerca lo vuelve a tocar en sus partes nobles y le dice que grande te has puesto Camilo. Y el sabe y lo piensa que no debio ir a ese bar, que no debio darle su tarjeta, no debió darle su dirección, que no debió recibirla de nuevo en su departamento. Pero solo atina a decir como un pequeño susurro perdí desde que te vi en el bar. Si dice ella, perdiste pero como todo un doctor. Hicieron el amor toda la noche y Camilo fue feliz de nuevo.

    Jueves. Camilo despierta con la respiración, agitada, mira el reloj, siete y media. Ya tiene que irse al hospital. Cinco años ha pasado y aun piensa en Paola. En esa noche en esas semanas donde fue timado, pero ya paso ahora es jefe de la área de cardiología, y le va mucho mejor. Pago la universidad, viaja por toda América dictando conferencias. Tuvo una novia en Argentina cuando hizo el doctorado. Pero ahora esta solo con la rutina de siempre. Buenos dias doctor, buenos días señorita Jiménez como esta todo. bien aca estan sus citas. Bien déjelas ahí. alguna novedad. Nada doctor, ah espere una señorita dejo esto para usted. Camilo quedo helado como estatua de hielo sudando frio. Recibió el pequeño paquete forrado en manila del tamaño no más grande que una caja de zapatos, lo abrió y solo rio, eran diez mil dólares y una pequeña nota junto a una fotografía. Hola doctor Camilo sabe he vuelto a la ciudad y con la novedad que necesito ayuda, pondré un negocio y te necesito. sabes que pago bien. Te veo hoy a las diez en el bar. Camilo ríe se sienta en su escritorio de cedro mira la foto, es ella en una playa está más delgada tiene un hermoso bikini, se pinto el cabello rubio. Junto a ella hay un hombre gordo que ríe. Camilo coge el teléfono, señorita Jiménez llame a mi banco, y también cancele mis citas de hoy, saldrá de viaje doctor. Algo así señorita, Camilo piensa acaso tendrá otra treta que hacerme, o se dio cuenta que me ama de verdad, o solo quiere hacer negocios conmigo. Pero sabe que no es verdad y todo se resume en la idea original de hace más de seis años y lo dice en voz alta, ella me timara. Camilo se levanta se estira un poco y sonríe, sale de su oficina se despide de su secretaria, que tenga buen día señorita Jiménez. Igual usted doctor se le ve muy feliz alguna buena noticia. No señorita solo que hoy me siento feliz. Y era verdad Camilo era feliz de nuevo
     
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