Blanco

Me mira,
y sus ojos son ácidos,
y perforan la atronadora noche
de mi aliento.

-¿Qué tienes?
¿qué color se dispone a violar
mi pureza?
¿qué duelo te menciona?
Vienes a mí armada de puñales
de humo, de costrosas raíces.
Enciendes un fuego redentor
en mi vientre.
Me hieres con baladas de llanto.
Perros de tinta husmean
en mi blancura.
¿Qué tienes, Soledad?
¿Quién eres hoy?
Sólo yo reconozco las desinencias
de tu Voz.
Sólo yo puedo interpretar
el volcánico lenguaje
de tu Sombra-.

 

Me encantó este poema sobre la soledad, donde abundan metáforas maravillosas.
Encantado de leerte , poetisa. Es un auténtico poder disfrutar de buena poesía, como ésta que nos ofreces en esta ocasión. Me gustó especialmente " vienes a mí armada de puñales de humo".
Mis aplausos y un fuerte abrazo

 

Bello, intenso, sobrecogedor... impactantes imágenes querida amiga...
Un gusto volver a leerte...te abrazo con todo mi cariño...

 

Un sentimiento punzante y arraigado al desaliento. Una joya Marla, para disfrutar en soledad.

Abrazos.

Palmira

 

Interesante juego de imágenes
que se interrogan entre si...
Aplausos , me encantó leerte.

 

La soledad como protagonista en todas las formas que sugieres para sentirla, un gusto tu poema Marla, siempre la lectura de tus poemas es exquisita, saludos y abrazos.

 

Un verdadero placer. Gracias.

Un saludo.