Suicidio

Lo he pensado muchas veces
Deseo terminar con mi vida
Mi vida tiene dobleces
Que no me permiten que la viva.

Lo he pensado muchas veces
Oh, despreciable Belcebú
En este trance con tantos jueces,
¿por qué me pones tú?

La mañana es un infierno
Los nubarrones, por medio día
La tarde se me esconde
No puedo vivir, ¿dónde?

En qué quedó mi niñez?
Esos días tan hermosos?
Acaso. malvado basilisco
Para la muerte me tienes listo?

Quien trocó mi día en noche?
Quien mi cielo azul, en un negro vacío?
Quien convierte mis mañanas
En una vil bausana?

Y esas bellas damas
con mucho y más desplante
Por qué me hacen ver
Como un nigromante?

Quien convirtió mis héroes en cobardes?
Mi familia, mis amigos ¿adónde se han ido?
Será que estoy preparando el sable
Para caer malherido?

Ya se acerca la hora
La hora de tocar el infinito
Digo adiós, como queriendo
Decir que estoy ahíto.

Por qué oh! Dios no escuchaste
Mis palabras malheridas
Ahora que estoy al final de mi vida
me marcho sin saber si me amaste.

Quien quemó mi alma?
Hasta dejarla consumida?
Quién me hizo perder la calma?
Y, ahora, quien la cuida?

Ya tengo lista la cuerda
Que pondrá fin a mi vida
Sé que a pocos le importa
Y sé que ninguno, de mi vida se acuerda.

Perdonen todos mis malas palabras
Perdonen todos mi desprecio por la vida
Pero no pude nunca abrazarla
pues ya la siento consumida.

Ya tengo preparada la soga
Para asirla a mi cuello
Sólo me resta decirles adiós
En mi último resuello.

 

Cristian, me gusta la construcción de tu poema, y los contenidos, claro, son tristes y funebres, espero que no estén inspirados en la realidad sino solo en la fantasía de la literatura.

Haciendo una revisión de lo que proyecta tu poema, a mi me consta que en realidad nadie tiene la culpa de lo que a uno le suceda, del sufrimiento infantil quizá si, ya que los niños son desvalidos, y quizá algunos ancianos , pero los adultos, no. En la cosmogonía andina, solo el hombre que no tiene Kallpa (fuerza interior y autoconocimiento) sufrirá, por propia inacción, y nadie más tiene la culpa.

Saludos cordiales

 

Gracias Giovanni. Te quiero dejar con la incógnita, pues ni yo mismo sé lo que quiero. Me es difícil explicar el trasfondo del texto, pero lo escribí en un momento brutal de mi vida. No se si aún tiene vigencia, sólo Dios lo sabe.
Te recomiendo que leas mis otros textos con la finalidad de que saques tus propias conclusiones.
Cariñosos saludos.
aDios.

 

La invitación a seguir leyendote es valida, amigo Cristian, un abrazo

 

Queda hecha la invitación.
Saludos.

 

El suicidio no está penado por la ley, porque la víctima es el asesino, así que sólo es una cuestión "moral" Ud sabe por qué un borracho no tiene moral? porque el alcohol desinhibe... Emborrachese, pierda la moral, y suicidese, es fácil, lo difícil es emborracharse solo, por qué? porque tomar solo, es una cuestión "moral" .

 

Sabes amigo, la historia de mi vida ha sido tan triste y tan difícil como no puedes imaginarlo, sin embargo, a la edad de 40 años encontré la felicidad y aún hoy, soy felíz. A veces nuestras posibilidades demoran un poco. Así que ánimo, tal vez no ha llegado tu momento. De todos modos, te dejo mi mano extendida. Un saludo.

 

Gracias por tu hermosos comentario Nomar. Lamento por lo que me cuentas, pero lo importante es que ya encontraste la felicidad. Gracias por lo de "te dejo mi mano extendida". Lo siento como un gran apoyo.
Saludos.

 

Gracias Maramin por tu comentario.

 

La verdad te digo, has conseguido que se erize el bello con tus letras...Son brutales!!
Creo que como bien has dicho, no sabías que dirección tomaban tus letras, ni porqué plasmaba ese astío a la vida, yo pienso que la misma vida te mostró su otra cara en ese momento y tú hábilmente nos lo haces ver.
Me ha encantado venir...Me voy impresionada para bien amigo.
Un saludo

 

Gracias por tu opinión. Pero te digo que lo tomes como los altibajos que tiene la vida. Es más, yo escribí este texto directamente en esta página, no lo redacté previamente en un procesador de textos. Lo construí en el momento justo en el que mi estado de ánimo vacilaba.
Gracias por leerlo.
ADios.

 

Gracias Mave por tomarte un tiempo para leer este breve texto. Breve pero intenso, pues no estoy pasando por mi mejor momento. En otras palabras tómalo como una catarsis.
Cariñosos saludos.

 

¿Quién no ha sentido alguna vez el deseo de cerrar la puerta para siempre? Los vaivenes se tornan tempestades pero amainan, todo amaina...

Un abrazo.

Palmira