el precio de la libertad

el precio de la libertad es la soledad
nos enseñan de pequeños
indirectamente
que necesitamos personas para crecer
ser alguien, para salir adelante
nos dicen que necesitamos amigos y personas
que nos ayuden a tomar decisiones
que tan solo nosotros podemos
cuando en realidad
no los necesitamos
no necesitamos cadenas
que nos arrastre a un abismo
a un sitio de oscuridad y odio
en realidad somos capaces
de romper y destruir
todos las cadenas que aprisionan
somos capaces de ser libres
pero el precio de esa libertad
sera la soledad

 

Me gusta la poesía y me atrae mucho el tema de la soledad.
Para mi la soledad no tiene porque ser mala e incluso es necesaria lo que ocurre que debe ser por elección y no por imposición.

Soy una persona muy independiente y necesito mi espacio, mis momentos y hasta mis temporadas en soledad pero eso no significa que no disfrute de la compañía de alguien especial, y conste que entiendo el amor desde el punto de vista de la libertad, sin egoísmos ni ataduras, valorando el compañerismo por encima de todo.

La soledad tiene mala fama pero es sólo eso.

Un abrazo poeta, encantado con tus versos.

Jon

 

Emocionantes letras magníficas de una composición brillante y sobresaliente.
Jorge Lemoine y Bosshardt, "Estrella Máxima" de Mundo Poesía.

 

¡Totalmente de acuerdo!

"Quien sigue su propio camino en la vida, corre el peligro de estar solo. Eso es lo que tienen los caminos propios: que nadie sale a socorrerte."

 

No lo veo así. Primero habría que comprender que es realmente la libertad (que no es tan sencillo). Hay muchas formas de libertad pero la libertad completa no existe, las personas no somos autosuficientes (necesitamos a otras personas para satisfacer y desarrollar nuestra condición humana).
Pienso que el ser humano no busca verdaderamente la libertad, lo que busca es la felicidad y para ello necesita de los demás, y cuando se es un grupo la libertad siempre está condicionada al conjunto.
De la misma manera hay "soledades" y soledades. La soledad es tan necesaria como perjudicial es su exceso.
Pero también es cierto que a menudo no encontramos "nuestro sitio" entre el grupo, y podemos tender a aislarnos para sentirnos "libres", aunque esto lo veo más como una simple falta de afinidad con nuestro entorno cercano que una necesidad (o un precio a pagar) de soledad. Habrá que buscar nuestro propio "grupo"...

Un placer reflexionar con tus versos, Frank. Saludos.