al envase más bonito

Porque las flores más bonitas
Se alimentan de gotitas
Y porque las lunas
Que son tan lunas
son fragantes e imperfectas
he decidido quererte.

Para que me hables de tus cosas
Y te parezcas enfadada.
Para que me des luz en mis nubes
Y agua en mis desiertos resecos de ternura
Porque eres mi cactus lindo
En esta maceta fea, te estudio sin logse.

Diré de ti, lo que no supe escuchar.
Y soñaré tus insomnios
Y volaré como un vuelo de ambos
Mientras me abandono en mis hábitos,
Mientras olvido mis abandonos
Y tus últimas decepciones.

Salías y yo entraba,
O entrabas y yo era quién salía.
Decidiste mis decisiones pendientes
Y flirteaba los descuidos de tu falda.
Como un motivo o, un olvido.
El desaliento y el desencuentro;
Inmoral historia del impuntual que soy.
Del desorden que soy.

E incendios y repeticiones,
Repeticiones e incendios.
Venenos que me huelen como sabes.
Cansancio y dolor, y canciones,
Y tardes de sexo y cine negro,

...y la tristeza también.

​

 

No sé muy bien si te leía por esas fechas
aquellos años que una tal "calor de julio"
hacía y deshacía en mi nombre.
Me gusta la tristeza, sin ella no se entenderían ciertas alegrías,
creo(es mi opinión)que los mejores poemas
se escriben en ese estado.
Me gusta mucho leerte en blanco y negro.
Un abrazo, compañero.

 

Bello poema, me gustó amigo Oscar. Un abrazo. Paco.

 

Gracias Paco por tu comentario...
Solo hace ocho años desde que escribí estos versos rescatados por la amiga Rosario...
Gracias por pasar y dejar tu impronta... (te leo)

 

Rosario...
...como siempre, a lo María Giménez, me dejas sin argumentos... me acordaba de este poema, pero hacía años que no lo leía...
Gracias por rescatar estos versos