El afilador

Se escuchan a lo lejos unas lánguidas notas
cruzando la alborada llega el afilador,
la rueda del destino trae de tierras remotas
no dejes que se acerque no lo dejes, amor.

Que anoche yo tenia unas alas hermosas
y el cielo varias veces yo conseguí rozar.
Como el mal jardinero que ha podado las rosas
ha cortado mis alas sin oírme gritar

Ha vuelto,amor, ha vuelto, cambiará nuestra suerte
de siempre tuve miedo a su silbo cansino
de falso ruiseñor que va anunciando muerte.

¿Quién sabe los deseos que segó en su camino?
Se fue el afilador en pos de otro destino,
yo viviré en tu olvido si llegara a perderte.



Inspirado en el hermosísimo poema Juana de Ibarbourou El afilador ,que en su caso representa el día. Y también en la imagen de un afilador que ayer me sorprendió con su sonido en mi calle y como despertó en mi, sorprendentemente, miedo, angustia, malos presagios...​

 

Querido Eduardo, qué suerte que seas el primero en dejarme tu mensaje, cuanta razón en tus letras...ayer desde mi casa escuché el sonido del afilador, ¡cuanto años sin oírlo! corrí a la ventana tenía este afilador un encanto especial, parecía salido de un cuento, bajé con mi cámara y le pedí permiso para fotografiarlo, fue muy amable y me dijo que si. ¿Cómo expresarte Eduardo los sentimientos encontrado que tuve al oír su musiquilla? se me erizo la piel, pero una angustia, un extraño temor y una especie de malos augurios ahuyentaron mi alegría inicial.( un tema para el psicólogo seguramente)
Quería dedicarle un poema, a la figura del afilador, en principio de ensalzando su imagen...pero se fue torciendo. Luego busqué en internet y me encontré este poema de esta importante poeta Uruguaya Juana de Ibarbourou, que yo desconocía lamentablemente...ella define al día como El afilador, "con sus doce cuchillos de plata"...
EL AFILADOR
Este dolor heroico de hacerse para cada noche
Un nuevo par de alas...
Dónde estarán las que ayer puso sobre mis hombros
El insomnio de la primera hora del alba!
Día, afilador de tijeras de oro,
Y puñales de acero, y espaldas de hierro;
Anoche yo tenía alas
Y estuve cerca del cielo.
Pero esta mañana
Llegaste tú con tu flauta, tu piedra.
Tus doce cuchillos de plata.
Y lentamente me fuiste cortando las alas.
Juana de Ibarbourou

Como verás la insigne poeta uruguaya Juana de Ibarbourou hablaba del día, ese era su "afilador"; como veras yo me fui por mis miedos aunque use sus "alas"....solo me queda agradecerte tu atenta lectura y tu profundo análisis que me dejas en tu comentario;y que muestra un vez mas, la fortuna contar con tu experta mirada.
Un abrazo,Eduardo, mil gracias.

 

Hola Matias, gracias por tu cercanía, por lo que dices, porque realmente para mi desde niña el afilador es,eso, un personaje silencioso,parco en palabras, como si solo hablara con su silbato; ese silbo misterioso que a su vez invita al silencio; claro que esta es mi versión...ya sabes como somos para imaginar
Mi mas cordial saludo, Matias junto a mi agradecimiento por tu lectura.

 

Estoy segura Marga, cada corazón es como es, incluso no es el mismo en todo momento, como no son las mismas las emociones que lo mueven. Seguro que tu afilador te hará danzar por el paraíso de tu Jesús...
Gracias por tu atenta lectura y tu comentario, querida Marga,
Isabel

 

Efectivamente, esa misma sensación que se une al paso del circo, también me lo despiertan las marionetas.., nadie me convencerá nunca de que, determinadas marionetas, usadas durante tantos años,no tengan un espíritu propio, aunque estén abandonadas en un rincón...de acuerdo también de la implicación que tiene eso que dices de que el afilador trabaja el sesgador metal.
Me encanta compartir este sentimiento, gracias por acercarte a leer y por tu generoso comentario.
Un cordial saludo,
Isabel

 

Gracias, ¡ qué belleza de comentario, Arnet! una suerte coincidir con un poeta que generosamente me aporta su inspiración bellisimos tus versos, mil gracias poeta.

 

No, no..estimado Destinos, para nada es simbolo de malos presagios, lo que cuento es un sentimiento mio,,,no se de que profundidades viene, ni en que recónditos acontecimientos lo pudoieron desencadenar, son mis miedos, nada que ver con el pobre afilador que para otros, hasta puede significar un personaje magico y benéfico.
Seguramente a ti te inspira otra cosa, mi apreciado poeta. Yo soy tinerfeña, de las islas canarias, hacía tiempo que no veía ninguno.
Saludos cordiales

 

La verdad es que creo que era eso, lo de afilar cuchillos, siempre tuve miedo a los cuchillos ¿ves? ya me he ahorrado una consulta al psicólogo ...si, creo que eso era lo que me atemorizaba la gente llevaba unos enormes.
Saludos.

 

Mi muy apreciado Salvador, me encanta lo que cuentas, ya le decía yo a Destinos, que esas cosas son muy personales, a saber de donde me viene ese sentimiento misterioso y oscuro... esa chispas de las que hablas ¡cuantos niños no tendrían esa misma sensación y su sonido les sonara liberador! somos tan particulares, por fortuna, eso nos enriquece.
Una enorme alegría tenerte aquí, Salvador, Gracias,
Un abrazo grande, amigo, con recíproca admiración.
Isabel

 

Gracias Ubaldo, si, creo que ese miedo va unido al los miedos de la infancia, cuando los mayores nos advertian contra los vendedores ambulantes y otro personajes desconocidos; lo malo es que,a veces, el coco esta entre los más conocidos. Los cuchillos también era un elemento a temer.
Gracias por estar aquí, Ubaldo y por tu amable comentario.
Isabel

 

Querida Eratalia, sabes que? creo que algo de la relatista que fui, queda en mi, tengo mis relatos abandonados y a vece sus personajes se quieren colar en mis poemas ...este afilador seguro que escapó se uno de ellos,
Si, al afilador de la foto que te mande´le podía haber bajado mis cuchillos y tijeras pero seguramente me saldrá mas barato comprar otro en IKEA , Esta calle mía está llena de restaurantes de prestigio, ellos son una clientela segura.
Un abrazo mi querida y realista amiga,poeta, pintora, no te vayas lejos que necesito que me pongas los pies en el suelo de vez en cuando.
Un abrazo grande.

 

Querida Lourdes , qué gusto que me da encontrarme con tus letras con tu entrañables y cálidos comentarios, como le decía a Eratalia, creo que los personajes los que , a veces , les daba rienda suelta en mis relatos en prosa, están ansiosos por tomar protagonismo y se cuelan en mis poemas.
¿Nunca has visto un afilador? pues te dejo la foto que hice al que me trajo la inspiración con su silbato ...como verás este, por su vestimenta, mas bien parece un personaje alegre de cuento infantil eso me llamó la atención,por eso le pedí permiso para fotografiarlo, los de mi infancia eran mas grises.
Un abrazo querida Lourdes , gracias por tu bendiciones.

 

jajajaja Pues si, y no me digas que ese flautista no tenía su lado oscuro, que dejo al pueblo sin niños, solo quedó uno que por su cojera no pudo seguirlos ...¿no? o ese era otro cuento?...jajaja ay, que me lío; de todas forma, Javier, alguien que afila cuchillos no barrunta nada bueno,
Yo te mando besos y abrazos, como decía nuestro compañero mexicano, Alfredo, y adminístratelos tú como puedas

 

Mi querida Isabel, ¡que cosas,¿verdad? el afilador nos despierta tantas emociones diferentes, como diferentes somos los seres humanos...
Tú tienes el arte de reflejar mi poema de ser su espejo, dándole doble valor, ¿cómo agradecértelo querida POETA? querida amiga, mil gracias.
Un fuerte abrazo y muchos besos.
Isabel