Placer

Placer


Al entrar en el laberinto a oscuras

juegas a dibujar sus paredes,

rito complaciente de opacar resistencia,

en la sublime lucha por llegar

a ese punto de la emboscada

donde el regreso ya no existe,

y descubro entonces que rendirme

es la única salvación posible.

 

Hola Yacosta, bienvenida antes de nada.
Quiero decirte que me ha gustado mucho tu poema y ha sido un placer leerte. Un saludo.

 

Esta poesía tiene algo que me gusta y es que trasciende la belleza para comunicar algo.
Yo creo que la poesía no puede aferrarse solo a la belleza porque pierde así su sentido filosófico y
entonces deja de ser arte para convertirse en un pasatiempo.
Está hecha, como la música o cualquier arte, para comunicar algo. Lo que sea pero algo. Tampoco
hace falta que comunique los secretos del universo. Basta con que transmita el sentir de una persona.
Saludos cordiales de Saturno.