No temas

No temas mi amor está guardado,

por más que las mujeres se muestren,

tu aroma de mujer ya está en mi pecho,

no habrá tormentas que lo arrasen,

ni una ninfa distraerá mi sentimiento.


No temas del engaño y la mentira,

que mis oídos sordos ya no llegan,

ni las retina de mis ojos se iluminan,

ante la carne vibrante de una ninfa,

tu serás mi cielo mi tormento.


No temas que no habrá diáfana mañana,

ni lunas que encandilen mi pensamiento,

sabré guardarme del intento,

de rozar con mi piel, alguna mano,

ni mirar otros ojos a la pasada.


No temas mi corazón es solo tuyo,

como tuyos mis ojos y mis brazos,

mi corazón arde por dentro,

mi sangre es un rio entre mis venas,

un rio de amor y aguas serenas.


JUAN CARLOS VILLANUEVA
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Me resultan un poco contradictorias las imágenes de arder y las aguas serenas, y no solo por la evidente contraposición entre fuego y agua.
yo no tengo experiencias en las que basarme, pero por lo que he oído, esa fidelidad que se declara en el poema no se basa en la pasión, sino en lago que se construye con tiempo y que llega después.

Por eso la imagen de las aguas serenas me parece muy acertada. El corazón que arde por dentro es una imagen en la que yo no confiaría para cumplir ninguna promesa.