Niveles de profundidad

Niveles de profundidad



Yo no se nada sobre tal acontecimiento, podría no ser cierto,

pero cuentan que un joven cruzó la calle sin ver a los lados y lo atropellaron.



Pobre señor, conmocionado por algo que dominó su cordura,

con firmeza viendo al vacío fue en dirección a su muerte.



Otra víctima descubierta la noche de ayer

en esta esquina ubicada en la periferia,

apodada por la comunidad como la curva del diablo,

de la que se sabe por los registros de las autoridades

es una de las esquinas mas peligrosas de la ciudad.



Roberto era un hermano para mí.

Sostengo que fue mal de amores

lo que impulsó a su pecho,

deseoso de un sedante permanente,

a cometer esta clase de atrocidades.

Pero les aseguro nunca estuvo solo.



Entonces me descubrí espantado de mis ecos

y me aventé desesperado buscando un verdugo.

Lo vi terrorificamente igual a mí,

aquel rostro que impactó esta guillotina

que corre a más de docientos kilometros por hora.



-La suma del vacío, que nace al dudar lo real,

mas el vacío que nace al dudar lo no real,

en este caso las dudas de asesino y asesinado,

corresponde a una sumatoria de ceros

capaz de introducirse en cualquier otra secuencia.

Comienza a manifestarse por un instante como vacío superior,

acontecimiento que daremos una categoría demoniaca.

Concluimos se trata del diablo,

interesado igual en este fenómeno,

que le compete ciertamente

porque le abre una puerta

a la posibilidad de la ausencia de la fe,

en alguna de la partes de este cruel encuentro-



Ahora lo recuerdo todo, yo mismo dispongo de mi propia muerte,

ajustemos los destinos, que mis egos se resuelvan limpios como desastre,

porque solo así podrán finalizar su procesión rigurosamente custodiada.



Justo enfrente del charco rubí,

una hormiga siente, al igual que nosotros

con sus antenas lo desconocido.

 

Impactante, realista y atrapante poema!! Felicitaciones, amigo poeta!!

 

Muchas gracias Miguel, feliz de presentar nuevos trabajos

¡Nos estamos leyendo! Saludos c:

 

Es uno de los mejores poemas que he leído en mucho tiempo. Atrapa de inmediato porque tiene la sobriedad de una crónica periodística, con elementos perfectamente ubicuos, pero la reflexión que hace y la que motiva conforme avanza el poema describe ese shock ante el espectáculo que quien se arroja a su muerte, dotándolo de significados que uno intuye como propios.
Tu poesía es arrojarse al tren de la vida, eso se nota. Felicitaciones, camarada.

* Por cierto, esos "niveles de profundidad" por los que uno desciende paulatinamente, se sienten también como una elevación casi metafísica.

 

Que buena onda que te dio esas impresiones, en efecto mi poema busca una exploración metafísica, o patafísica por lo imaginaria jaja.
No estoy muy acostumbrado a jugar con todos los recursos que ando usando aquí, pero pronto tendremos mas poemas para que exploremos juntos jajaja.

Saludos Pedro