La historia de un momento, por Chiara Sassone

El hombre no hablaba. Paseaba por las calles silenciosamente, nadie advertía su presencia.
Capturaba los momentos, y con ese simple hecho, era feliz. Los capturaba por montones, los nombraba y los almacenaba con mucho cuidado, y volvía a capturar más momentos. Siempre llevaba una caja, donde guardaba los momentos.
Se paseaba por pueblos, ciudades, bosques. Cuando se cansaba de un lugar se colaba en trenes y barcos para ir a otro lugar y volver a comenzar.
Un día, el hombre vio una sombra y quiso capturarla. Como siempre, nadie se dio cuenta de su presencia, pero la sombra lo había visto y huyó. La persiguió por calles y parajes, pero ella siempre lograba esquivarlo. Pronto anocheció y ya no pudo distinguirla. Triste y cansado, se sentó en el banco de una plaza. Repentinamente, los faroles de la plaza iluminaron la figura de una joven. El hombre reconoció en ella a la sombra, pero ya no pudo moverse. Había quedado atrapado en un momento, en la caja de la sombra.

A la memoria de Sergio Larraín

(Chiara es mi hija mayor, de 14 años.
Escribió este cuento luego de asistir a la exposición retrospectiva del gran fotógrafo chileno Sergio Larraín.)

 

Me encantó el cuento, por lo bien escrito pero sobre todo porque pone en juego la imaginación. A medida que vamos creciendo olvidamos que es la condición esencial para crear...imaginar, lo es todo.
Una historia que atrapa y que tiene un desarrollo y desenlace original.
Bien por Chiara y por su papá y su abuelo que seguramente acompañan y alientan ese proceso creativo.
Saludos:
Malena.

 

Gracias por comentar, Malena.
¡Chiari se va a poner contenta con tu apreciación!
Y sí, tratamos de incentivarla en todo... Mis tres hijos no van a la escuela, así que la formación que tienen la reciben en casa. Tratamos de darle lo mejor, y de compenetrarnos con sus intereses.
Así que cada logro tiene un doble sabor de alegría.

 

Me dejás más que sorprendida con el hecho que hayan optado por la educación no formal. Sabía que algunas familias la elegían pero no me lo habían contado de primera mano digamos. Yo también tengo un hijo de 14 y uno de casi 12...pero no hay manera que se hayan interesado por la lectura o la escritura, si bien son reflexivos lo suyo no es la palabra escrita. Me imagino que debe ser muy enriquecedor para todos esa instancia educativa de puertas para adentro del hogar...muy interesante.

 

Te dejo mi pagina de facebook sobre desescolarización
www.facebook.com/experion

En cuanto a incentivar la lectura en los niños, hay una sola manera, no hay otra. Tenés que leerles todos los dias. Le leés y leés y leés, y llega un punto en que se empiezan a interesar por leer ellos mismos. A mis hijos les leemos desde pequeños, todas las noches, les hemos leído Mark Twain, Salgari, Stevenson, Borges, etc. Hoy leen por motus propio.
Si querés más asesoramiento podés comunicarte por facebook o allí te paso mi teléfono.

 

Recién entré al face que me dejaste...estoy muy sorprendida con las condiciones para la música de tu niño...voy a seguir viendo. Gracias es una linda ventana por donde mirar y otra perspectiva desde donde pararse. Yo soy maestra de primaria así que me resulta super interesante conocer esa propuesta.
Un abrazo y gracias de nuevo:
Malena.

 

Dale, y recordá, podés comunicarte conmigo por cualquier consulta del caso, siendo maestra tal vez no te gusten algunas declaraciones que hago en la página de "experion" sobre la escuela, pero bueno... es lo que pienso... Saludos y hasta muy pronto!

 

Dale! Sé que hay mucho por hacer en ese sentido. Leí varias de tus declaraciones y me parecen sumamente interesantes y respetables.
Saludos:
Malena.

 

Es una historia muy imaginativa y bien narrada. Me ha hecho recorrer de su mano el detalle del personaje. Felicita a tu hija de mi parte porque tiene buena imaginación y capacidad para plasmarla.

Un abrazo Fer.

Palmira

 

Gracias Palmira, le voy a contar a Chiartita tu opinión y se va a poner contenta. Ella piensa que yo digo que está bueno porque soy el papá, pero a mi me parece un cuento magistral, fresco y muy conciso, bien resuelto.

El cuento fue parte de un proceso muy lindo, porque primero fuimos a la muestra fotográfica de Sergio Larraín, y al salir charlamos mucho sobre sus fotos, y sobre su vida, ya que a cierta edad se retiró, y quemó todos los negativos de sus fotos y se fue a vivir a un lugar muy alejado, a practicar meditación. Eso les impactó a mis hijos tanto como sus fotos.

Al otro día Chiara escribió este cuento, que me encantó por lo sintético y origina, y la idea de atrapar recuerdos y ser atrapado. Luego lo corregimos juntos, le marqué las falta de ortografía y algunas cosas que podría corregir, redundancias, repeticiones y algún detalle menor.
Luego sí, le corregí las faltas de ortografía y quedó listo para publicar. Fue un proceso muy lindo y muy creativo para ella, y la verdad es que el cuento me parece maravilloso.

Me sorprendió cómo resolvió el final. El personaje de la sombra, que de pronto es una chica y lo atrapa a él en su "caja". Me hizo acordar a esa creencia de los indígenas, que no se si será cierta o no, de que las fotos que quitan el alma. Y también me recordó a la fotógrafa Vivian Maier, en suma... para nosotros fue un hallazgo, porque Chiara escribe mucho, pero más que nada crónicas, o comics, pero no recuerdo que tenga cuentos.
Me parece que quedó impactada por un cuento muy surrealista que leyó hace poco de Octavio Paz, uno de una ola de mar. Creo que quedó influenciada por el tratamiento de ese cuento.

Como sea, me parece un primer cuento glorioso, y ahora lo está ilustrando, ya que dibuja muy bien... ¡veremos cómo queda!