No hay llamadas

Ascender sin parar, desde el féretro
al salón de aroma narcótico.
Caer sin parar desde el banco
hasta un horizonte de hollín.

Escribo con mi cálamo sustraído
a las musas del ocaso.
Levanta el ánimo hasta las gotas
de rocío, quiero solidificarlo
como los témpanos del odio.

Vinos a medio descorchar para
celebrar que el fin llegó ayer
y aquí estamos sentados deseando
que acabe ya esta ilusoria agonía.

A veces sueño que juego con los
cocodrilos y disfruto al verme
recostada sobre sus escamas puntiaguadas
cual barrera que aprisiona mis hogueras.

Disfrutaba observando el cine de mi
desdicha y tu circo de payasos,
me subía a las ramas cual primate
compitiendo con el aire.

Temporalmente me asusto de mis ojos,
me alivia ver como el espejo se ensucia
con los ácaros de la valentía.

El teléfono cuelga de la mesita de noche,
si no tengo llamadas tampoco tendré
voces que me secuestren a media noche.

 

Imágenes que capturan por su fluidez y sensibilidad...
Un gusto leerte...
Te abrazo con todo mi cariño...
Nancy

 

Muchísimas gracias por su dulce comentario-
Un saludo y un abrazo.

 

Me ha agradado la profundidad del poema y la construcción muy bella. Te saluda respetuosamente, Julius 1200.

 

ALLA
ALLA
EL SENDERO
EN EL SENDERO

BELLO POEMA

 

Una excelente apreciación de este poema por parte de Luzyabsenta. Respetuosamente Julius.

 

Me alegro de que te haya gustado mi composición.
Muchas gracias y un saludo.

 

Esa soledad está llena de sonidos que me atrapan y no me dejan identificar realidades objetivas de pensamientos idílicos.
Muchísimas gracias por su comentario.
Un saludo.

 

Gracias por comentar.
Un saludo.

 

Excelente poema, me ha encantado... saludos dark, que vaya todo muy bien.

 

Muchas gracias por su comentario.
Le deseo todo lo mejor.
Un saludo.

 

Las apreciaciones de Luzyabsenta son arte hechas opinión.
Un saludo.