Sus amargos recuerdos.

Se vierte la nostalgia de la noche
en las constelaciones que tapan la nubes grises.
Los mares fluyen profanos en la tierra
por los fuertes vientos del huracán que se aproxima
a las costas del Atlántico.

Yo sé que ella llora en las costas,
se despide de las lágrimas que guardó en su diario,
pues ya no es necesario
llorar más por lo llorado.

Yo sé que ella llora este descanso,
yo, ella y nada más que ella
sabe
lo mucho que cuesta despegarse
del pasado.

Y,
aunque parezca raro o extraño,
es un bien depresivo y expresivo que le marca
le quema y le hiere
porque este diario fue de ella
cuando estaba muerta en el infierno,
y las aguas fuertes y el viento
se llevan en paz
sus amargos recuerdos.​

 

«Ya no es necesario llorar más por lo llorado»

Lo anterior es totalmente cierto, una frase poética muy hermosa; llega un punto en que tenemos a fuerza que superar cualquier dolor, cualquier barrera, para poder continuar en busca de la felicidad.

Pese a la nostalgia que envuelve tu poema, me ha gustado mucho por todo lo que expresa.

Un abrazo, y mis besos.

 

Cuanto lirismo derrama tu inspiración Claridad, letras de profundo sentir, moldeadas con pluma de amor puro.
Ay mi niña, como sabes acariciar los recuerdos mas valiosos, bendecir esos momentos que una vez nos dieron un porque es lo que toca.
Otro abrazo para ti, feliz noche y bendecido amanecer.

 

Parece autobiográfico, pero no hay forma de saberlo con certeza. Y la noche, esa es la parte que más me gusta de tu poema, por alguna razón es cuando llega la noche que nos vemos completamente vulnerables ante todos nuestros sentimientos y sensaciones convirtiéndonos en presa de nosotros mismos. Me gustó tu poema.

 

que palabras tan ciertas el pasado es pasado, y lo demás es solo algo nuevo, saludos bella

 

De cualquier manera, los diarios permanecen escritos en el alma por más tiempo del que nos imaginamos. Ella se despide del objeto, solo del objeto como un símbolo. Y decide lanzarse hacia el futuro.

Sea. Siempre mereció futuro.