Calmas

Calmas

Mientras ella me calma de ti
en mi vacilante bregar entre
la muchedumbre
escucha por igual balbuceos
o discursos
seca mis lágrimas disimuladas
sana momentáneamente
la tristeza
y reduce el miedo
con la inmediatez
que recicla mis lastres.

Tú, lúcida oligarca
eres guerra y paz a partes iguales.
Apabullante presencia
que propicia recaídas
multiplica adicciones
y experimenta socialmente conmigo.

Aún así, tengo la certeza de
que me calmas de mi mismo.

 

me ha gustado su poema


saludos

 

Muchas gracias poeta. Saludos