Sed de llama

Llevadme a oír el mar, uncid el viento,
volvedme en las alturas al arcano
sonido de la brisa, sed vilano,
y sentiréis mi alma en movimiento.

Traedme el horizonte hasta el aliento,
enarbolad el tacto de mi mano
para asirme en la luz, que sea vano
todo bajel sin rumbo al sentimiento.

Verted toda mi sangre en la mañana,
cuando el cielo germina el presentido
polen de albor que de la noche emana.

Soplad luego en mi polvo conmovido,
mas no ceguéis el vano a mi ventana,
¡que ya puedo partir habiendo sido!

 

No va más, poeta. El escrupuloso respeto a a la forma al servicio, que no al estrangulamiento, de una linea argumental fluida que impacta configuran un soneto impecable y digno de figurar en las mejores antologías poéticas. Y es que todo esmero se derrama en él, nada se atasca en su exquisita trama.

Yo, como siempre, a tu rueda.

Mi abrazo más rendido, amigo.

 

Otro soneto, verdaderamente excelente, éste. Y el otro que en pocos días nos has presentado, estimado Felipe. Lo interpreto como un canto vital en todos esos hermosos elementos que poco a poco se van introduciendo, el mar, el viento, el horizonte que hacen moverse al alma o al sentimiento al cual quiere conferírsele rumbo estable. Qué hermoso primer terceto y qué cierre tan magnífico con ese "polvo conmovido" metáfora del cuerpo inerte al cual no se quiere hurtar la esperanza representada en el "vano de la ventana" y para finalizar ese perfecto endecasílabo ¡que ya puedo partir habiendo sido!, habiendo vivido en plenitud.
Todos los días son de aprender, estimado compañero. Mil gracias por el momento de poesía.
Con todo afecto, un saludo muy cordial.
Salvador.

 

Antes de comentar el soneto quiero darle de nuevo las gracias por publicarlo pues como ya dije desde el principio, su presencia en nuestro espacio es siempre un lujo. Un mensaje que destaca no solo por su evidente calidad y riqueza de vocabulario envuelto en certeras metáforas sino también por ese halo de místicismo que recuerda a los grandes clásicos y que ya se aprecia desde el título "Sed de llama". Es realmente encomiable como desde el primer verso se va urdiendo el ovillo hasta llegar a ese cierre magistral donde el hombre se funde con la naturaleza.
Me gustó también muchísimo el penúltimo verso "mas no ceguéis el vano de mi ventana" que transmite un soplo de esperanza de querer ver la luz aun después de la muerte.
Yo he compuesto también algún poema de esta temática, pues me encanta la parte lírica que aporta. El hombre y la naturaleza son un misterio sin duda, pero su verso ha superado con creces al mío. Le felicito.

Un saludo cordial, y no deje de publicar.

Mouse

 

También me ha gustado mucho el soneto, en especial ese último terceto.

Saludos.

 

Otro soneto más, ejemplo de tu excelente quehacer poético, querido amigo. El primer terceto es espectacular, bravo!!

 

No sabría decir, Felipe, con qué parte de este hermosísimo soneto me quedaría porque me ha gustado todo íntegramente, no tiene desperdicio.

No cabe duda de que , o bien estás bendecido por la más exquisita de las musas cuando compones, o eres un poeta que se esmera extraordinariamente en sus trabajos y los edita cuando ya están primorosamente acabados. Ahora comprendo el porqué de tus numerosos premios, poeta.

Mi más sincera felicitación por estos momentos de grata poesía que me has hecho disfrutar.

saludo cordial.

 

Apreciado amigo Vicente:

Agradezco mucho tus generosas palabras. Me alegra que te haya gustado mi soneto.

Como sabéis los que conocéis bien esta estructura y tenéis el talento de ejecutarla con éxito, el soneto, en tanto que forma, no debería de ser más que el envoltorio de un poema.
Yo procuro que en ella, en la forma, no haya ruido o chasquido que evidencie una debilidad o fragilidad de la estructura. Me refiero a eliminar las asonancias no premeditadas, los antirritmos no buscados y fácilmente evitables, las rimas excesivamente manidas o esperadas, la falta de soltura sintáctica y la de adecuación del lenguaje al propio mensaje, o la pobreza en la impertinencia de los epítetos, etc. etc.
Intento (ovbiamente en vano) escribir un poema con estructura de soneto, de manera que al lector le atrape el contenido más que la forma, que ésta pase en algún sentido desapercibida...
Claro está que todos estos condicionantes hacen de este empeño un verdadero desafío, que yo frecuentemente acepto, aunque toda mi obra poética es "poesía" "libre".
En este poema late el "carpe diem", el latido vital que entraña el movimiento (el tema difícilmente puede ser original, pues todos los valores antropológicos del hombre están ya más que tratados a estas alturas). De ahí mi profusión en el empleo de "verbos de acción", la avidez en la contemplación de la naturaleza, la pujanza del sentimiento... Procurando en mi osadía de aficionado que, como te decía, apenas se note que se trara de un soneto.

Bueno, disculpa si en mi pensamiento en alto me he excedido en la extensión, al uso de los foros, de mi comentario.
Recibe un gran abrazo.
Felipe.

 

Esto le decía yo a Jorge (Musador) al hilo de tu "Si no has de serle fiel":


En mi opinión, Musador, el soneto, como bien dices, es una forma poética, sí, más una forma excluyente. Me explico, ya se sabe que ese inefable malabarismo de palabras llamado Poesía supone siempre un soporte para modelar un pensamiento, una reflexión, un sentimiento en un marco de reducidas dimensiones. Nunca es libre pues siempre ha estado y estará sujeta a la sutil servidumbre a la que las imprecisas pero siempre ciertas exigencias la someten.
Todo lo expuesto en un papel es Poesía si logra la pretendida conmocción pero un soneto supone un reto añadido: el de la dificultad formal para alcanzar el mismo objetivo. Supone, por tanto un desafío, una apuesta apasionante que nos permitimos con el idioma jugando con sus reglas.
Tal parece que la denominación de "soneto" encarcela una categoría formal que le es inherente pero las definiciones, en no pocas ocasiones, trascienden a su significado original. El Arte subvierte las formas y muda lo definido.
Así pues, desde mi humilde perspectiva, el asunto planteado no es más que una cuestión semántica más que otra cosa. Es un poco la "nivola" de Unamuno.

Un cordial saludo.

Está claro, "Sed de llama" es un poema. Embutido en un soneto, sí, pero fundamentalmente un poema.
Todos deberíamos aprender de una vez por todas que un soneto no es un mero ejercicio formal sino una configuración armónica que exige alcance poético más allá de su intransigente rigor.

Dejo claro que comparto tu opinión.

Mi felicitación, poeta.


Fuerte abrazo.

 

Salvador, apreciado compañero:

Me safisface que el soneto te haya gustado. Tu comentario describe atinadamento lo que en su contenido intenta plasmar; la vida en su plenitud dinámica, la consciencia y aprehensión por los sentidos de cuanto nos rodea en nuestra travesía vital.
Te doy las gracias a ti por tu atenta lectura y me siento muy honrado por ello.

Recibe un afectuoso saludo.
Felipe.

 

El honrado soy yo por poder estar en tu poesía y con tu palabra.
De nuevo un saludo cordial.
Salvador.

 

Un soneto ejemplar, estimado Felipe. La vocación de trascendencia en la belleza natural, tema clásico como pocos, expuesta con delicadeza y sobriedad en pulcros endecasílabos. Llaman la atención tus encabalgamientos (versos 2-3, versos 10-11) que suavizan los efectos formales de la rima.

abrazo
j.

 

Puedo decirte, Felipe, que este es uno de los sonetos más hermosos que he leido en el foro.
Me deja sin aliento.
Aspiro a poder escribir algún día a este nivel.
Te felicito.
Un abrazo afectuoso.
Jazmín

 

Claro, un soneto, un buen soneto, no es ni más ni menos que un poema libre (todos lo son, curiosa denominación para una estructura poética) Tanto, que escapa de su aparente yugo formal como para que uno no se de cuenta de que lo es hasta que le pica el absurdo y menguado empeño en explorar y definir su armadura como premisa previa para valorar su alcance poético.
El soneto tiene sus reglas, sí, pero deben de pasar desapercibidas al servicio del mensaje que pretende transmitir. Como todos los poemas, claro.

Mi abrazo de siempre, admirado poeta.

 

Enhorabuena por este soneto, Felipe, y mil gracias por compartirlo con nosotros. Es elegantísimo y encantador. Todo un placer leerte. Me gusta mucho cómo eres capaz de sugerir imágenes exquisitas yuxtaponiendo elementos dispares entre los que estableces vínculos sutilísimos:

Fantástico.

Un par de sugerencias para la puntuación:

a) En el v. 3 eliminaría la coma después de "vilano"
b) En el v. 7 se podría poner punto y coma en lugar de coma tras "luz" debido a que la sintaxis cambia.

Y en cuanto a las consideraciones que habéis hecho sobre la estructura poética del soneto, diré que para mí sucede lo contrario. Estoy totalmente en desacuerdo con expresiones como ésta:

Decir que la forma poética es un envoltorio es indicio de una concepción dualista de la poesía: lo poético esencial es el contenido, mientras que la forma es un accidente, y son hasta cierto punto separables. Yo creo que en la historia de la poesía (en la época clásica) no sucedía así: si leemos, por ejemplo, los sonetos del Siglo de Oro, notaremos que el propio contenido poético está estructurado esencialmente por la forma; digamos, de otro modo, que la estructura del soneto estructura el pensamiento poético. Por eso en el primer cuarteto encontramos una presentación, en el segundo una profundización, en el primer terceto una variación o novedad, y en el último, la conclusión (que es la organización más clásica del soneto). Lo que vemos, por tanto, es que la poesía surge cuando un contenido se ha creado desde el principio ligado a una forma. En otras épocas y estilos, en cambio, no ocurrió así, claro (por ejemplo, el modernismo). Yo prefiero una poesía que surge como autotrascendencia del lenguaje cuando el contenido es informado (investido de forma).

Un ejemplo claro de esto lo tenemos en este soneto tuyo que comentamos, y es, a mi juicio, el mayor y único defecto que le podemos encontrar: todo tu soneto discurre en una placidez sabiamente mantenida (muy ligada a los imperativos) hasta que en el último terceto introduces la esperada adversativa a mitad de estrofa y sigues para concluir con ese último verso que es como un disparo. Se trata de una súbita aceleración final del ritmo que no armoniza bien, creo, con el tempo que estabas empleando: es como si un compositor termina una canción de cuna con un redoble de timbales y un fortissimo de trompetas. Eso se debe muy probablemente a que la estructura de soneto es extrínseca al contenido de este poema, como tú mismo has explicado muy bien antes. Si fondo y forma estuviesen intrínsecamente vinculados en tu pensamiento poético habrías podido escribirlo de otra manera donde la música no sería algo accidental. Por ejemplo:

Mas no ceguéis el vano a mi ventana
soplado ya mi polvo conmovido,
¡que ya puedo partir habiendo sido!

Con ese pequeño cambio de orden de dos versos la música estructural queda graduada de otra forma más acorde, a mi juicio, con el desarrollo del discurso (obviamente habría que valorar también la distribución de las rimas, que se ve afectada, y la asonancia vano-soplado que surge). No obstante, no te pongo esta alternativa para sugerirte una modificación de tu poema, está muy bien como está y es muy representativo de la poética que practicas y defiendes. Sólo la he puesto para ilustrar un poco otra concepción de la poesía.

Saludos.

 

Muy agradecido, Mouse, por tan generosas como inmerecidas palabras. Me alegra mucho que haya gustado este soneto al que he pretendido dar vitalidad, "movimiento"...

Recibe un gran abrazo, compañero.
Felipe.

 

Muchas gracias, Oncina

Muchas gracias, Oncins, por tu lectura. Celebro que te guste.

Recibe un abrazo, compañero.
Felipe.

 

Te doy las gracias, Luis Adolfo, por dejarme tu opinión sobre el soneto.

Recibe un abrazo, compañero.
Felipe.

 

Como un canto desde la sangre. Qué bello! Felicidades poeta. Placer pasar por su espacio . Saludos.

 

"su cuerpo dejará, no su cuidado".

 

Te agradezco, lmacgar, tus generosas palabras y esa inmerecida felicitación que me otorgas.
Intenté transmitir en los versos la pujanza de la vida, la libertad, el movimiento; su justificación por la satisfacción que dan las pequeñas cosas, a veces inadvertidas por su simplicidad...
Un afectuoso saludo, compañero.
Felipe.

 

Quiero resaltar este párrafo, que no tiene desperdicio, de la exposición que haces a Musador y con la que concuerdo ampliamente:
Todo lo expuesto en un papel es Poesía si logra la pretendida conmocción pero un soneto supone un reto añadido: el de la dificultad formal para alcanzar el mismo objetivo. Supone, por tanto un desafío, una apuesta apasionante que nos permitimos con el idioma jugando con sus reglas.

Una vez más, mi agradecimiento.
Un abrazo, amigo.
Felipe.

 

Gacias a ti, Salvador.
Un cordial saludo.
Felipe.

 

Te agradezco mucho, Musador, tus valiosas apreciaciones sobre esta propuesta.

Recibe mi consideración y afecto.
Un abrazo.
Felipe.

 

Te agradezco mucho, Isabel, tu favorable apreciación de estos versos.
Gracias también por esa gemerosa acogida a este espacio.

Un afectuoso saludo, compañera.
Felipe.

 

Muy agradecido, Jazmín, por tan generosa valoración del soneto.
Soy un simple aficionado, compañera.
Gracias también por tu amable felicitación.

Recibe un abrazo.
Felipe.

 

Muy de acuerdo con cuanto comentas, Vicente. Este es el quid, como muy bien señalas: "...absurdo y menguado empeño en explorar y definir su armadura como premisa previa para valorar su alcance poétic0".

Un abrazo, amigo.
Felipe.

 

Muy interesantes tus apreciaciones, Prcantos, qe aprecio enormemente. Meditaré sobre todo cuanto tan amablemente expones y propones, que lo encuentro muy para tener en cuenta. El soneto es una simple propuesta, sin ambiciones especiales. Como sabes, ese criterio al que te adieres de que "la poesía surja como autotrascendencia del lenguaje cuando el contenido es 'infirmado' (investido de forma)" no es demasiado aceptado en el panoramoa actual.

Te doy las gracias por haber dedicado tu tiempo a tan sustanciales consideracions a mi soneto.

Recibe un afectuoso saludo, companñero.
Felipe.

 

Me alegro de que te guste, Elizabeth.
Gracias a ti, por tu lectura y felicitación.

Recibe un cordial saludo.
Felipe.