Me uno a ti, niño grande...

ME UNO A TI, NIÑO GRANDE

Me uno a ti en este sentir
En esos días llenos de risas

Únicos en la memoria
Nacíamos cada día, sin mas ambición que vivir
Olvidando las horas, los puntos y comas.

Ausentes de envidias y pecados

Todo nuestro universo era una plaza
Inventamos historias que sólo nosotros creíamos

Escondíamos el amor, el amor mas sincero
Nada de malo, nada de obsceno

En las tardes contábamos las estrellas fugaces
Saltábamos muros
Tirábamos piedras
Encendíamos hogueras

Soñábamos despiertos, en un día eterno
Entre tanto crecíamos sin darnos cuenta
Nadie nos enseñó a sufrir.
Tampoco a llorar
Iniciamos el camino hacia la madurez
Recordando y recuperando al niño que en nosotros se durmió.

SHA.

 

Hermosa niñez, hermoso poema!! Felicidades compañera de letras!! Un abrazo

 

Ayyyyyy que nostálgico me pongo al recordar mi niñez, lo poco que recuerdo porque mi memoria al repecto me falla un poco, pero los sentimientos vinculados a todas esas actividades que tan bien relatas en tu bello poema quedaron grabados para siempre, palabras como reponsabilidad, seriedad, puntualidad...y otras muchas las desconociamos, libres como pájaros y con esa curiosidad innata de querer aprenderlo todo. Querida Sandra me encanta tu poema, la manera en que lo has escrito, sentimientos universales que abrazarán todos tus lectores.as. Abrazote de colores vuela y vuela. Paco.

 

Dulcemente emotivo mi querida amiga...
Un gusto volver a leerte...te abrazo con todo mi cariño...
Nancy

 

Recuerdos de esa infancia que tantas veces vuelve a nuestra memoria y que permite exhalar un profundo suspiro que llega hasta el alma. Un bello y emotivo poema, grato leerle. Saludos!

 

Es lo malo de crecer deprisa, compañera,
que uno pierde tesoros de infancia,
el niño que fue y su bendita magia.
Afortunadamente no siempre es así
y algunos lo conservan en la memoria,
en los actos, en los poemas...
Encantada de leerte, Sandra,un abrazo.

 

Rememorando la niñez etapa de inocencia y candidez, los mejores días deben ser aquellos. Me a encantado este bello poema, un abrazo fraterno saludos poeta.

 

Si no fuera porque hace frío, me metía en el río pero ya, je je.

Qué buenos recuerdos cuando todos los días eran una aventura. Ahora también lo son, pero no todos, ni mucho menos. La culpa la tiene el trabajo, je je je.

Seguimos saltando muros, pero con mucho más miedo a que nos pillen.
Seguimos inventando historias, eso siempre.
Seguimos encendiendo hogueras, hasta dentro de casa.
Seguimos soñando, aunque decrezcamos…
…y como somos de lágrima fácil, el sufrimiento solo dura un momento.

Creo que sigue con nosotros, y despierto, el niño que nos acompaña.
Foto y poema para enmarcar… y creo que he estado en ese río, me resulta muy familiar, je je.
Besos hasta tu isla, Sandra. Y coge paraguas, que acabo de ver que llueve que da gusto.

 

Que maravilloso poema repleto de ilusion. Sentirse como un niño de nuevo y volver a mirar el mundo desde sus ojos sin manchas.

Bravo Lirae!

 

Es lo único que nos mantiene con vida, la ilusión, la esperanza, esperando lo que de adultos no creemos, bañarnos de alguna manera en la inocencia que un día fue nuestro mayor tesoro...
Gracias, de veras...
Sandra.

 

Como me agrada leerte Miguel...Muchas gracias poeta...

 

Mi querido amigo, siempre me llenas la cara con una sonrisa...y el corazón con una caricia con tus letras.
Yo hasta recuerdo las guerras de piedras cuando en san Juan nos debatíamos para ver quien conseguia la hoguera mas grande, jejeje.
Un abrazo Paquito...y un morral de besos

 

Gracias Nancy...tu abrazo siempre lo recibo con cariño especial...

 

Ahhh, si...cuantas veces deseamos volver allí...Para como mínimo, cometer los mismo errores
Gracias Brisa...

 

Tus letras me han conmovido...escribes con carne, piel y sentimientos...
Gracias Rosario, me siento muy honrada con tu visita...

 

Gracias, Jota A. por estar tan a menudo regalándome tu tiempo...
Un abrazo...