Aurora

Aurora

Desperté frente al día con el sueño
calmado, y en la noche aún. Llamarte
quise de la alegría y despertarte,
y me contuve, amor, frené mi empeño.

Permanecí en silencio, solo, isleño,
y no guardé las ansias de contarte,
mis palabras pensé, para llevarte
conmigo por el mundo de mi ensueño.

Entonces con la voz amplia y segura
grité por si me oías a esa hora,
por si estabas despierta y sin tristura.

¡Y tu voz contestó! ¡Qué encantadora
y qué limpia, y qué clara, y cuánto pura
se alzó serenamente aquella aurora!
​

 

Bello y amoroso soneto , saludos , Lesmo.

 

Celebro, estimada compañera, haya resultado ser de su agrado esta propuesta mía.
Con todo afecto, un saludo muy cordial, y agradecido.
Salvador.

 

Que momentos tan dulces y luminosos nos narra esta poesía rimada, querido amigo Salvador, un placer visitar tu obra. Enhorabuena por tu arte. Abrazos, felices días.

 

Qué mejor amanecer que oyendo el canto de ese ruiseñor. Saludos cordiales, Salvador.

 

Hermoso poema impregnado de musicalidad y sentimiento. Escribes muy lindo. Encantada de leerte. Saludos y Bendiciones.

 

Hermosa aurora nos describes con tan hermosos versos, es un placer. Un abrazo cordial.

 

Muchas gracias, querido compañero, por acercarte con tu palabra amable y por dejar tu huella.
El placer es mío de recibirte.
Un gran abrazo, también te deseo lo mejor, amigo.
Salva.

 

Qué amable eres, querido Sergio. Siempre con la palabra justa, y agradando.
Con un abrazo, van mis afectos.
Salvador.

 

La claridad la aporta tu palabra, queridísima Isabel. ¡Qué bien me suena siempre!
El gusto será siempre mío de oírla.
Con un abrazo muy fuerte.
Salva.

 

Muchas gracias, querida Lourdes. Celebro que esta propuesta haya sido de tu agrado, amiga.
Encantado de este paso amable por mis letras.
Con mis afectos va un saludo muy cordial y el deseo de que tú también seas siempre bendecida.
Salvador.

 

No siempre.
jajajajajjajajaj
Saludos, Salvador.

 

El placer es mío de recibirte en este espacio, querido Miguel. Creo recordar poemas hermosísimos, que resuenan aún en mis oídos, recorriendo rincones granadinos, me parece que sabes a cuales me refiero.
Afectuosamente, un gran abrazo, compañero.
Salvador.

 

Bueno, ¡ácidas no te las conozco!
Abrazos.

 

mmm

 

Jejejejejejejeje y más jejejejejejeje
Mil gracias.
Salva.

 

Precioso, Salvador ! Un placer leerte.
Un abrazo.

 

Celebro enormemente que hayan sido de tu agrado estas letras. El placer, siempre mío de recibirte.
Con todos mis afectos, un gran abrazo, querido Ángel.
Salvador.

 

Ave, Ligia!

Entré en el templo tímido, y ardía
la antorcha con mil sombras en el techo,
hierática la diosa, entre su pecho
de piedra, aquella rosa sostenía.

De pronto, un movimiento, procedía
de un velo transparente que, de hecho
apenas ocultaba a poco trecho,
hermosa, a una vestal que se escondía.

Robé la flor sin más a aquella diosa,
notándola más fría que la escarcha,
y dije: ¡Cuánta piedra no prestigia!

Y fue que a la mujer le di la rosa
tras el velo, temiendo yo su marcha,
perfumó, se le abrió..., ¡y es que era Ligia!
​

¡Emocionado me tienes, querida compañera!, que unos versos míos hayan abierto la espita de tu inspiración para que salga este raudal de poesía es algo que yo no merezco. Inmediatamente la pluma ha despertado a estas horas hermosas de la madrugada para preparar este pequeño presente que te dejo con todo mi agradecimiento por tus maneras y por tu presencia. ¡Qué más quisiera yo que recibir todos los días una muestra de tu poesía! Me has hecho feliz y la imaginación me ha llevado a inventar ese templo donde eclipsabas a esa diosa pétrea y sin vida. Gracias, mil gracias por este dichoso momento.
Con todo afecto, un abrazo fraternal, emocionado y agradecido, desde la admiración.
Salva.

Nota: Este poema está para no publicar porque es tuyo y para ti se escribió. Si deseas sea leído por más compañeros no tendré inconveniente y será un honor dedicártelo al hacerlo público.

​

 

Cálida luz irradia este poema, semejante a la que bellamente describe tu poema.
Es siempre un gran placer deleitarme con tus letras.
Saludos y un fraternal abrazo querido amigo.
Alfredo

 

Muchísimas gracias, querido Alfredo, el placer será siempre mío de verte en estos espacios. Celebro que haya sido de tu agrado.
Gran abrazo desde el corazón.
Salva.

 

Otra caricia poética que siento y que viene de tu mano, estimada Ligia. Desde luego no quepo de sentirme afortunado en este lugar de palabras y pensamientos. Recibo mucho más que puedo entregar.
Recibe todos mis afectos con estos de agradecimiento.
Salvador.

Tengo el pecho desbordado
por un corazón henchido,
de versos color dorado
y un impecable sonido.

Tengo el alma en otro lado
cerca de un cielo encendido
y un celaje algodonado
que allí le pusiste un nido.

Tengo adornada la frente
con el laurel que me has puesto
y bajo un arco potente

paso, y te digo con esto,
que se me ha hecho ya urgente
ponerlo de manifiesto.​

 

¡Hola, Ligia! Mil gracias de nuevo por acudir a este espacio y dejar tu amable huella. Muy buen viaje y que todo sea propicio. ¡Hasta la vuelta! Intentaré pasar por el Foro que tan bien moderas.
Muchas gracias por todos estos momentos.
Con un fraternal abrazo.
Salvador.

 

Bonita forma de recibir la aurora, cargado de sueños. Me gustó mucho. Chausito.

 

Lo celebro, estimada Andreas. Mil gracias por su visita a este espacio mío de letras.
Afectuosamente,
Salvador.