y ahí sigo...

Hay días que me dejo llevar
por el puto balanceo de las horas.-
No hace falta ser un crack
para entender que la apatía
es una tarjeta de fracaso;
me basta con salir al balcón
y echarme un cigarro con otros mediocres
para adivinar un futuro
de artrosis crónica y bata del mercadillo....
Siempre hubo clases, querido,
yo pasé de los ideales de mi padre
al ducados negro y ahí sigo
fumando clase media
tirando a baja...

Rosario Martín

 

Lo dicho querida amiga...tu sello, tu nube y luz...siempre un gusto leerte...aquí o allá...
Te abrazo con todo mi cariño...
Nancy

 

Es muy difícil poner oro y verdad en lo cotidiano. Me gusta mucho cómo escribes por el rastro de humanidad que dejan tus versos. Un abrazo.

 

Momentos de apatía q deslumbran tus letras. Sin duda es mejor no acariciar malos pensamientos nos hace pensar en futuros que aunque posibles no significan nada ante la suerte de un Cronos en un presente. Un abrazo

 

Un poema que me a llevado a reflexionar, y que e disfrutado.
Un placer leerte.
Un abrazo fraterno poeta.

 

Has dibujado un paisaje tan auténtico que, parece que el peso de los años cayera de golpe en la contemplación de un balcón herrado como los caballos, dóciles por el paso del tiempo y muy a pesar de su sangre indómita.
Un lujo esta entrega Rosario. Felicidades!

Palmira

 

Cosas de la vida compañera... de la cual nadie es culpable; quizás tan solo esa personal predisposición a mostrarle al mundo
la esencia de tu verdadera rebeldía. Pero tu rebeldía es la consecuencia de pasados circunstancias y lejanos hechos... Y por eso
te comprendo. Excelente mensaje compañera.

 

Todos en algún momento caemos en la rutina de la vida. Lo importante es no dejarse vencer por ella. Un placer leerle.

 

Ay Rosario, un halo de melancolía sobrevuela el lirismo de tus emotivas letras, esa sensación es muy común en los mortales, y a veces todos los sentimos así, pero con solo cambiar nuestro chip todo cambiará, sacudámonos esa apatía que se adueña de nosotros y a escupir con fuerza y a pisar fuerte en el suelo para arrancar de nuevo, ea...Encantada de leerte mi querida amiga, muchos besos con admiración y cariño....muáááááacksss...

 

Me gustan tus versos rompedores, de clase media. Esa clase media que nos estamos viniendo a menos en estos tiempos de crisis y mentiras. Me gusta la mirada limpia, a pesar de la amargura, con que te asomas al mundo, a tu mundo que se extiende desde un balcón a la calle. Y las horas, que cruzan nuestras vidas, de forma rápida o exasperantemente lenta, pero que son las horas de uno mismo, aquellas en las que vamos vaciando el garrafón de vida que nos toca. Rosario, no te diré de mi admiración, porque de sobra la conoces. Recibe un beso y un cariñoso abrazo.

 

Yo pasé del Lola pascuero de la niñez al Tres Carabelas sin filtro; después seguí fumando, y hasta hoy. Qué buena esa imagen de los Ideales de tu padre (sin filtro) al Ducados de toda la vida.
Y aquí seguimos, entre apatías, comiéndonos el mundo si hace falta.
La artrosis, por aquí anda; el tiempo, lo que se escapa; los craks, otra mediocre droga a la que resistirse. Con lo bien que se está cuando se es Nadie o poca cosa.
"Ansina" es la vida, y qué bien que plasmaste este tramo.
Besos, amiga entera, después de volver a leer este cachito de entrañable poesía.

 

Gracias, Nancy,un abrazo.

 

Gracias, compañero,un abrazo.

 

Gracias, compañero,un abrazo.

 

Gracias, compañera, un abrazo.

 

Gracias, compañero,un abrazo.

 

"Has dibujado un paisaje tan auténtico
que, parece que el peso de los años cayera de golpe
en la contemplación de un balcón herrado como los caballos,
dóciles por el paso del tiempo
y muy a pesar de su sangre indómita."
El lujo es tu comentario-poema.
Gracias, querida Palmira,gracias infinitas.
Un fuerte abrazo, compañera.

 

Muchas gracias, compañero,un honor tu visita.
Un abrazo.

 

Muchas gracias, compañera,el placer es mío.Saludos cordiales.

 

Muchas gracias, compañerita,encantada yo de tenerte aquí.Un abrazo grandote.

 

"Me gusta la mirada limpia, a pesar de la amargura,
con que te asomas al mundo, a tu mundo que se extiende
desde un balcón a la calle.
Y las horas, que cruzan nuestras vidas,
de forma rápida o exasperantemente lenta,
pero que son las horas de uno mismo,
aquellas en las que vamos vaciando
el garrafón de vida que nos toca...

Qué importancia cobran tus versos en este presente, amigo mío,
y no sólo por su belleza poética...
Un día recordaremos una primavera
que vimos pasar a través de ventanas y balcones
donde brotaban lágrimas, certidumbre y aplausos...
Espero y deseo que todo vaya bien en tu vida, Luis,
abrazos y más abrazos.Gracias...

 

Eso espero Rosario. Un beso