Cuentos no tan cuentos

Dejó Fiona a Shrek siendo princesa
y se acercó a mi mesa a hacer compañía,
Cenicienta lleva dos horas de atraso
y eso que tiene cajón para las zapatillas,
y mirando bien a esta pelirroja
creo que es hora de dar el zarpazo.

- El próximo trago va por mi cuenta-
y me desnudó con una mirada tan indiscreta
que me sentí violado....

- Haces bien en no esperar a Cenicienta,
la otra noche me dijo la sirvienta esa
que te ha puesto los cuernos
con el príncipe encantado-.

Pero relajo, si apenas un mes
que abandoné a Pulgarcita
porque aunque estaba muy bonita
sentí que no me llegaba a los zapatos.

De verdad que tenía razón Caperucita,
si con esos labios tan grandes de la abuelita
se podía fundar un imperio de lujuria
pero en vez de eso la pobre criatura
inauguró los cuentos encantados.

Y bueno... lo mío no es cuento
resultó que Cenicienta ignoró nuestra cita
Shrek fue sacado ebrio por el gato y el burro
y resultó que Fiona no era tan ogro
era más bien una leona
con la que ya quedé a qué hora
vernos mañana para otro cuento de pecado.

 

Sensacional... historia; para mí que se lo compra la DreamWorks... Pero lo que más me encantó fue que Fiona lo violó a puro zarpasos
ya que se convirtió en una leona. Alguna vez tenía que perder galán de caricatura... (una broma) Pero, carajo... jajaja... ¡Dios mío...! las cosas que uno tiene que aprender... Un abrazo fraterno estimado Roberto, y que siga su magnífica producción literaria más allá de las bromas. Su amigo:

 

Maravilloso!!! Muy interesante su forma de escribir la poesía con analogías de películas y cuentos infantiles. Saludos poeta.

 

Un placer detenerme en tu obra amigo Roberto y poder disfrutar de su singularidad.
Un eterno abrazo siempre.

 

Muchas gracias amigo Gitano, ojalá aprendamos a sacar lo leona de las mujeres con mas frecuencia. Saludos. Un placer recibirte por acá.

 

A veces hay que sacarle provecho a lo que ya conocemos. Saludos. Un placer recibirte por acá.

 

El gusto siempre es mio, amigo Halcon. Saludos. Un placer recibirte por acá.

 

Entre cada cuento no tan cuento, hay algo de cuento que es verdad. Saludos. Un placer recibirte por acá.