El hado lenguaraz

De salitre
son las espinas del mar

camaleónico
da la hora
el dardo del corazón
que amenaza con detener la noche

ahora que las palabras se van venciendo
y todo precipita
hacia la plenitud del símbolo
gineceo de algas donde se agita
la bruma del color

extraño cementerio
es el de los versos deformes
que no supieron soñar
con la fuerza propia de los débiles​

 

Sabe poeta cuando estaba leyendo este poema escuchaba esta melodía,



no sé si la pueda escuchar, pero le diré que su poema se lee tan hermoso con la música. Y me transporté a los versos deformes y los abracé en la distancia. Escribe muy rico, me ha gustado mucho porque me hizo soñar despierta…

Abrazos de colores

 

gracias por hacerme partícipe de su sensibilidad y sí nada más importa ...

 

Como esquirlas dibujando en el silencio y amparando entre la niebla sus episodios...
Siempre me gusta leerte querido amigo...te abrazo con todo mi cariño...
Nancy