S. Benito de Lérez (Soneto en gaita gallega)

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Oleo de Merchi Brianes

Unas verrugas salieron en mano
donde no pude, bandeja llevar,
duelen cual golpe, con mazo pegar;
tengo los dedos de modo malsano.

Voy en volandas a un tal cirujano;
hace trabajo, sin bien no quedar,
vuelvo de nuevo, de nuevo operar,
otra vez vuelven los bultos, tal grano.

Santo de Lérez, Benito patrón,
cúrame piel, que la tengo muy mal,
ruego milagro, con una oración.

Misa escuché en la capilla local.
Sanan mis manos con tal bendición.
Tiene más fuerza que el médico actual

Corregido por Azalea

Basado en un hecho real

 

¿Te pasó eso de verdad? Patidifuso me quedo, Castro. Tal vez la fe disponga de más recursos terapéuticos que una cohorte de galenos. Doctores tiene la Iglesia.

Un abrazo.

 

Le pasó a un amigo que trabaja de camarero en Ourense. S. Benito de Lérez (Pontevedra) es abogoso de las verrugas y granos que salen en la piel . Conozco otros casos como éste.
La fe es muy importante pero incluso hay casos de los que no creían.
Ya lo decía Jesucristo, la fe mueve montañas.
Los médicos son necesarios, pero cuando la medicina no funciona, hay que recurrir a otros medios.
Un cordial saludo.
Castro.

 

Vaya, Castro, has contado una historia que está, como en muchas películas se dice: "basada en hechos reales"; para eso, obligado por ese ritmo 4-7-10, te has tomado alguna licencia poco ortodoxa como la del primer verso cuando dices "salieron en mano", o en el siguiente: "bandeja llevar" cuando lo correcto sería salieron en la mano y la bandeja llevar, pues ambas frases están pidiendo a gritos el artículo "la" , y mira que yo soy partidario de usar en ocasiones esas elisiones por lo que algún purista de la gramática me ha llamado la atención más de una vez, pero creo que hay casos en donde esa falta de monosílabos no "canta" tanto (ejemplos hay en los clásicos) y es más pasable; en cambio, en el de estos versos que te señalo, me chirrían un poco, sinceramente.
En el séptimo verso, tu necesidad de rimar te hace optar por una expresión como la que se hace en los doblajes de los westerns con los indios: "yo fumar pipa de la paz", quiero decir que haces ahí un uso incorrecto del infinitivo. Pero bueno, lo importante es que la historia ha quedado clara.

Como ya sabes lo que me gusta llevarte la contraria en cuestiones de creencias, te contaré yo ahora otra historia parecida pero de signo contrario: a una conocida mía un poco promiscua le salieron unas verrugas en las zona de los genitales (el papiloma VPH) y ella, que se avergonzaba un poco de ir al médico por ello, prefirió consultar con una santera de esas que dan remedias mágicos; bueno, mejor dicho, no fue a una sino a varias pues ninguna le curaba el mal. En esas estaba cuando por circunstancias de su diabetes uno de los pinchazos que se hizo en el muslo se le infectó gravemente y tuvieron que ingresarla durante un mes para no tener que amputarle la pierna. Pues bien, el tratamiento de antibióticos que le pusieron durante su estancia en el hospital fue de tal envergadura que no solo le curó la infección del muslo sino que, de rebote, hizo desaparecer por completo todas las verrugas de sus genitales ¡y sin la intervención de ningún santo ni tener que ir a misa!, cosa que le hubiese costado mucho pues es una escéptica en cuestiones ultraterrenales como yo que lo digo.

Como puedes ver, amigo, hay historias para todos los gustos.

Por cierto, también he leído de casos de gente que han abandonado tratamientos contra el cáncer por remedios de santería y ha acabado en el cementerio el enfermo y el santero sentado en el banquillo.

Un abrazo.

 

Veo incredulidad en los mensajes, yo creo que si, hay que recurrir a la fe, pero la fe en ti mismo es lo que cura de verdad.
Mi abrazo amigo Castro, no permitas que ignorantes se burlen de tus creencias.-Abrazos.-

 

No creo que digas esto por mí comentario, Catia. Ni por asomo se me ocurriría burlarme de Castro por sus creencias; yo sé en lo que él cree y él sabe en lo que creo yo y por eso no dejamos de tener una muy buena relación en nuestros mensajes cruzados en donde cada uno expone su opinión; en las mías lo que hago es exponer mis puntos de vista sin intención alguna de burlarme de mi amigo por sus creencias

En esto te doy toda la razón, Catia, es la fe en uno mismo lo que puede curar.

Un abrazo.

 

Veo estimado Ramón que lees mis respuestas, no tengo nada en contra de ti, es más te mande un privado para navidad, por no hacerlo en tus poemas y la razón fue porque no busco que me comentes. Nunca voy a entender por que ignoras mis poemas, soy aprendiz, y este foro se presta para las críticas que ayudan a mejorar, pero tu nunca lo haces. Eres uno de los mejores poetas de este foro y muchas veces he buscado las películas que mencionas. Pero ya me acostumbre a ser invisible. Con mis respetos Ramón, sin ánimo de ofender.-

 

Hola, doloroso soneto, que espero no haya sido a tí al que le pasó.
Me encantan los dactílicos plenos.
En el tercer verso me pareció un acento en la sílaba 3 y te sugiero el cambio que te dejo.
En el verso 13 el su no me parece con mucha fuerza. por eso escribí el tal.
Suenan un poco raro algunas frases como: con mazo pegar, sin bien no quedar , etc. Esperemos que llegue Miguel Angel a ver qué te sugiere, por si deseas cambiar esas rimas.
Me gustó leerte tu soneto de gaita gallega. Mis aplausos por incursionar aquí.
Saludos y abrazo.
Azalea.

 

Claro que está mal escrito el soneto, mas como es en gaita gallega y de las de antes, desafinan, por ser construidadas de forma artesanal; como mis conocimientos de filología, ja ja.
En cuanto al tema, que es lo que me importa, es verídico y date cuente que el paciente pasó dos veces por quirófono sin resultados satisfactorios por lo que recurrió al santo.
Tu vecina, como bien apuntas, hizo lo contrario.
Hay que recurrir siempre a la medecina, pero si esta no resulta, que yo sepa, los santos, si no curan, por lo menos no hacen lo contrario. Las santeras las habrá de muchas condiciones Ja ja.
Un abrazo,amigo J. Ramón y gracias por perder tu tiempo con un incompetente como yo.
Castro.

 

Puede que seamos nosotros los que nos curemos, al fin y al cabo, somos dioses en potencia.
Un abrazo, amiga Catia. Juan Ramón es un gran poeta y tiene derecho a no creer y a defender su no creencia. Ya sabes que cada cual de nosotros dice lo que más se aproxima a nuestras convicciones.
Nosotros, exponemos hechos, que por ahora no tienen explicación científica y por lo cual se satirizan. Pero para eso está la poesía, aunque mal hecha, como en este mi horrible soneto.
Cordiales saludos.
Castro.

 

Que gran lección me das, Castro y te la agradezco porque forma mucho.
Saludos y abrazo.