Tras la marcha nupcial (Soneto)

Éramos truenos de extinta conciencia,
efímeros como fúlgida hoguera,
de jinetes y quimeras de otra era
en vueltos en nebulosa vivencia

Enterrada quedó nuestra demencia,
la rutina la asfixió hasta que muera;
la grata pasión que en su tiempo fuera
de diamantina y pluma su existencia


El blanco algodón del perpetuo cielo
torno mustio sobre nuestro amor gris,
de azul candor nos quitamos el velo


Como un rasgón surgió la cicatriz,
herida la pasión quedó en el suelo.
Sollozante corazón sin motriz​

 

Dulzura sensible y emotiva en tus cuidados versos querido amigo...
Un gusto leerte...cuídate mucho!
Te abrazo con todo mi cariño...
Nancy

 

Triste realidad para muchas parejas
un placer leerte siempre
un abrazo cálido

 

Abrazos de melón y yo dulce abrazo
Amiga. Espero volver a leer una de tus perlas, A tu adorado Alex

 

Ciertamente amiga,
Ironías de la vida
Un sentimiento nos une
Y otro nos separa.

 

Un nostálgico y muy original soneto nos enseña


Grato leerle

 

Un soneto muy triste, el amor se acaba mas veces de las
que quisiéramos. Te dejo mi besito apretado en tus
mejillas.

 

Me ha gustado mucho su soneto de una triste realidad...
(Quisiera compartirle aquí una canción alusiva, pero no sé cómo hacerlo)
Le dejo mis saludos.

 

En efecto, siempre recogemos los pedazos de ese espejo roto, para ver otro rostro frente a él.

Gracias por tu connotadas palabras

Saludos.

 

Me hubiese gustado saber cómo hacerlo, para escucharla.

Saludos y gracias por tus cálidas huellas.

 

Duro pero real. Me encanta!!

 

Es la cruda realidad de la más ardiente hoguera extinta.
Hay que velar por el amor.

Saludos
Lex.