El color de nuestro planeta nos hace iguales

Azul en la mirada
y en el mar de tus aguas.
Azul en el cielo
y en el baile de tu pelo.
Azul en las mariposas.
En el paisaje que nos habla.
Azul de un planeta
que sigue girando
y dándonos sorpresas.
La vida es una de ellas.
Nos sorprende cada día.
Nos habla, nos acaricia.
Nos susurra sus fragancias
y hace que evolucionemos
En una amalgama de amor y locura
que trasciende
espacio, tiempo y materia.

 

Dulce melodía que hace danzar al alma amigo...
Un gusto leerte...cuídate mucho!!
Te abrazo con todo mi cariño...
Nancy

 

Nancy. Tus palabras son inmensamente gratas para mí. Me siento muy honrado con tu presencia en mi pequeño espacio. Me alegra que mi poesía te agrade y que tu presencia y cariño se hagan patentes. Ello me hace inmensamente feliz. Recibe un abrazo cordial y un beso cariñoso poetisa.

 

El amor mi querido Francisco, hace del mundo un espacio común donde
todos deberíamos participar de la mejor manera posible, un sólo color
compartido en un sólo corazón. Abrazar la vida con el alma en la mano es
o debería ser nuestra bandera. Gracias por el momento hermoso de tus
letras. Besitos apretados en tus mejillas.

 

Qué lindo el título que elegiste para un gran poema Francisco.

Siempre dulces y profundas tus letras compañero.

Felicidades y muchas gracias por compartirlo.

Abrazote!!

 

Anamer expresas bellamente un amor colorista y variopinto que enamora el alma del poeta. Sabes no te quepa la menor duda llegar a la fibra sensible . Tus palabras electrizan mi piel y mi voz al leerte se vuelve llorosa. Me impactan tus palabras . Y ese es un don que Dios te ha dado y que tu has sabido ejercitar con tu fantasía y noble corazón. Por todo ello te agradezco tanto la palabra como el gesto de tu cariño, de tu empatía y sobre todo ese saber hacer que ilumina tu alma y resplandece por donde quiera que vayas. Gracias corazón

 

Gracias Pincoya76. Si ojala nos haga iguales y este mar y estos cielos sigan llenos de vida y esperanza. Se que amas el mar su azul sus amaneceres y atardeceres. Sus claros de Luna. Sus mareas y sus bravas tempestades. El navegante prefiere una brisa alegre y constante. Yo prefiero un mar sereno cerca de una orilla y una cazuela donde se prepare pescado. Sería el sueño de mi vida haber sido barquero y pescador. Pero no se navegar. Solo sabía nadar hasta un fondo de 10 a 15m máximo. Pero esa vida esas pesquerías pasaron a la historia. Pero el azul de ese mundo del silencio sigue callado, vivo y presente en la memoria de todos los marineros también podríamos incluir según algunos a los turistas. Pero la mayoría de ellos no conocen el Mar de Neptuno. Ni se enamoraran de éste mar o lo que queda de el