Cursilería

Las esquirlas vuelven al murmullo y el murmullo vuelve a todo
¿Dónde está? ¿Escondida tal vez en la pared prendida y
en la sombra no perdida? El pellejo suprimido y
estático sobre sus ojos, sin querer se transformaba,
no podía reprimir el impulso, él la condensaba toda.
Movida hacia la catarata de lánguidos párpados,
se encontraba carcomida y por poco desfallecía,
el boquete la mecía, y en la senda aun estrecha no cedas él decía;
acongojada toda estaba, callose el pausado roce de adormecidos labios y
ella cobijada por la aceptada derrota retirada era,
la cursilería miraba del balcón, no podía más, se desintegraba, y
el tajado mármol cuando lentamente moría alcanzaba todavía a ver.
Azulejos (aves) de lejos desplumados y de plomo perforados
caían como cae la escarcha sobre la agonizante frente y
la flamante mente de curva espigada, amada.
El nuevo nacer, solo placer; no amor.​

 

Felicitaciones

 

Muchas gracias

 

Un poema nada cursi, para releer. Felicitaciones poeta.

 

Muchas gracias por sus palabras. Saludos, Marcelo Aurelio.

 

Un buen poema Marcelo, me gustan las imágenes que utilizas,
seguiré pendiente de tu obra. Gracias por compartirlo en el foro.
Besitos apretados en tus mejillas.

 

Me ha gustado mucho se me hace muy bien.
ha sido un placer dejar mi huella en sis versos
Abrazos fraternos,

 

Profundamente agradecido por su constancia en leerlos, muchas gracias por su apoyo.
Saludos, Marcelo Aurelio.

 

Muchas gracias, igualmente un placer que le haya agradado el poema.
Saludos, Marcelo Aurelio.

 

Muy buenas noches, gracias por sus palabras, encantado que le haya agradado el poema.
Saludos en prosa y verso.