Mansedumbre del espliego-.

De cordillera en cordillera,

trastornando los hábitos de los lugareños,

obsequiándoles con mi canto de urogallo en celo,

propinándoles patadas en el trasero,

testículos y otras orondas partes, formando

latinajos y quebrantando la fronda hasta esquilmarla.

Con voz de hombre cazurro

de voz de pelo en pecho, pelambre metafísica

que arriesga su hirsuta cabellera hasta

la decimonovena parte, espaciosamente

perturbado, yo, hijo de bárbaros y desapasionados,

emito mis propios decretos, y conservo la luna

como en un guante. Gusanos de seda

e inveterados secuaces de los latidos,

gallos de pelea o combate en los acuarios,

mosaicos de teselas investigadas por agentes disfrazados,

y esa decimotercera parte de las novelas de folletín.

Oh mansedumbre de los espliegos, y esos iris falsos

que manosean los verdugos.

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Te voy a decir un secreto, tengo un gallo de pelea es hermoso realmente hermoso y me despierta justo a las 5:30 am y bueno soy acuario
se te abraza en la distancia

 

Gracias por el comentario y la confidencia, yo tb tengo gallos cercanos, y no son tan bondadosos, me despiertan a las tres! Un abrazo!!

 

ja ja ja ja ayyyy pobre de ti, este gallo apareció de repente un día y se ha quedado, tiene una plumas tan hermosas cuando le da el rayo del Sol que me dan ganas ser gallina, ja ja ja ja ja otro abrazo estimado amigo,

 

me gustan esos versos tan rurales e imaginativos que escribe

 

Gracias y un saludo!

 

Un humor sarcástico que se refleja en tus versos hacen de esta una amena lectura amigo Ben, enhorabuena por tu arte. Un abrazo, y mis mejores deseos.

 

Gracias tribu- de ahora en adelante, te llamaré así, sino te importa!-. La ironía es un arte y como tal se trata de practicarlo. Como el sexo, todas las veces que se pueda, libremente. Un abrazo amigo y felices días!!