400 metros de verguenza

Camino.
400 metros
para llegar a mi domicilio.
En la esquina, un joven extremadamente delgado
luciendo un chaleco fluorescente
de los que usan habitualmente los cuidacoches.
-Señor, tendría una moneda?
-Es que me atacó fuerte el hambre.
Mientras saco de mi bolsillo una moneda de 10 pesos, pienso:
-Otra víctima del veneno hecho con residuos de cocaína, ácido sulfúrico y queroseno,
llamado pasta base.
300 metros.
Siento pasos que se acercan corriendo
dejándome atrás
- ¡gracias señor!
-¡Qué tristeza!
-Ya juntó para su dosis y corre hacia "la boca" a remediar la "fisura" de su angustia.
200 metros.
El chaleco fluorescente parece que vuela.
100 metros.
Es extraño,
ha desaparecido.
20 metros.
Con la boca llena, sale de la panadería y me levanta el pulgar.
Él,
feliz con su bizcocho,
yo,
avergonzado hasta la médula..

 

Es más fácil desintegrar un átomo que un prejuicio.” ... Albert Einstein. “


De le que no tengo prejuicio alguno es de tu poesía minimalista


Otro muy buen poema Miguel.

Un abrazo.

pd: ya, acorta ese versote del medio... ah, esto sí tira más a prejuicio versal

 

Muchas gracias Danie! Y ya le pasamos cuchillo a ese verso. Me va a quedar casi un haiku jajaja Tu visita y comentario siempre me motivan. Un abrazo

 

¡Muchas gracias, Maramin, por tu cercanía y por tu especial comentario!

 

Ha sido un grato momento Miguel, son pocas las veces que se lee poesía realista de alta factura. Te felicito poeta.

 

Me gustó, que descanso saber que aún se puede confiar en alguien. Que nuestra percepción exagera.

 

Excelente pasaje, estamos programados para entender escenarios que no existen o que no podemos comprender. Fue muy grato leerle, un fraternal abrazo.

Mauricio

 

¡Muchas gracias, amigo poeta, por tu cercanía y por el especial y muy motivador comentario! ¡Te deseo un excelente año!

 

Mil gracias, Luciana, por acercarte, leer y comentar!! Un abrazo

 

¡Muchas gracias, Mauricio, por tu amable visita y por el motivador comentario! Un abrazo, amigo porta.

 

Nada, que no hay manera de acertar, se ve que no siempre funciona eso de "piensa mal y acertarás".... jajajaja.
Muy grata y amena lectura, Miguel, gracias.
Un abrazo.
Javier

 

¡Muchas gracias, Javier, por acercarte y por el lindo y motivador comentario! Un abrazo, amigo poeta.

 

¡Muchas gracias, Rosmery, por tu cercanía y por tan especial comentario! Un afectuoso abrazo.

 

¡Muchas gracias, amigo poeta, por acercarte y por el especial comentario! Un abrazo.