Poema de un devora-sueños

Índice
1. Poema de un devora-sueños.
2. Nota.

1, Poema de un devora-sueños.

Hoy me pegué un banquete
digno de los dioses del Olimpo.
Celosas estaban la jalea y el vino
ante los manjares que devoré:
de entrante,
el sueño de un niño que sabía a miel;
lo probé, lo masqué,
¡delicioso!
De primero,
la pesadilla de una niña con regusto a vainilla;
le di un gran bocado,
¡fantástico!
De segundo,
el ensueño de un joven de azúcar;
engullido en un santiamén,
¡maravilloso!
De postre,
ay, de postre,
los deseos de dos gemelos acaramelados.
La comilona me costó
dos almax
de 500 mg
y una condena
de 80 años.

1. Oda al canibalismo.

2. Nota.

Hace dos segundos no estaba lloviendo, pero ahora está diluviando. A las nubes no les gustan los poemas tan oscuros como este (o, al contrario, les encantan y lloran de emoción).
Ya he mencionado que no me gustan las leyes, así que lo de la condena de 80 años también es ficción: no sé cuántos te podrían caer por un crimen semejante en mi país. Espero que bastantes.
Una vez mi profesora de literatura dijo que el título de una obra podía cambiar toda la interpretación de esta; he querido ponerlo en práctica aquí .

 

Me ha gustado bastante, macabramente genial.
Gracias por compatir.
Mis saludos cordiales.

 

Me alegro mucho, gracias a ti siempre por leer .
Un saludo.