1. Guest, ven y descarga gratuitamente el cuarto número de nuestra revista literaria digital "Eco y Latido"

    !!!Te va a encantar, no te la pierdas!!!

    Dismiss Notice

La Prohibida

Discussion in 'Prosa: Amor' started by Jose Anibal Ortiz Lozada, Jul 8, 2025 at 4:37 PM. Replies: 0 | Views: 12

  1. Jose Anibal Ortiz Lozada

    Jose Anibal Ortiz Lozada Poeta adicto al portal

    Joined:
    May 6, 2024
    Messages:
    1,152
    Likes Received:
    1,552
    Gender:
    Male
    [​IMG]

    No es mía.
    Y sin embargo, la pienso como si lo fuera.
    Como si sus pasos fueran una promesa rota que aún me pertenece,
    como si su risa tuviera la dirección exacta de mis heridas.

    Ella entra en el cuarto y el aire se detiene.
    No dice nada, pero su silencio me grita.
    Sus ojos esquivan los míos, y en ese gesto
    ya me ha dicho todo lo que no se puede decir.
    Hay cuerpos que se rozan sin tocarse,
    y el de ella…
    el de ella roza el mío con solo existir.

    Está casada.
    Lo sé.
    Lo repito como un rezo que no me salva.
    Tiene un nombre que no es el mío grabado en el dedo,
    una vida tejida con hilos que no me incluyen.
    Pero también tiene un temblor en la boca
    cada vez que me acerco.

    Yo la deseo en secreto.
    La deseo con la culpa que solo los valientes sienten.
    La deseo con la furia del que sabe que no debe tocar
    pero se muere por hacerlo.
    Y me pregunto si ella también sueña conmigo,
    si al cerrar los ojos,
    su cama no le parece tan llena.

    No quiero destruir lo que tiene.
    No soy ladrón de promesas ajenas.
    Solo soy un hombre al que le tocó querer
    a quien ya había sido elegida por otro.
    Solo soy el que ve en ella
    no a la esposa,
    no a la madre,
    sino a la mujer que aún sabe arder.

    Porque cuando me habla,
    aunque sea de cosas mínimas,
    siento que se rompe un pacto sagrado.
    Y cuando me calla,
    me incendia más.

    No es mía.
    Pero en otra vida, lo fue.
    O lo será.
    O quizás solo me pertenece en ese universo
    donde los pecados no se castigan
    y los besos robados no se devuelven.

    En este, solo me queda mirarla
    y desear que alguna vez,
    aunque sea por un segundo,
    se deje querer
    como nadie se ha atrevido
    a quererla.
     
    #1

Share This Page