Triste despedida

Oscuras ausencias se marcan en letras moribundas que se desintegran en un recuerdo sepultado en cada uno de mis textos que te reclaman en silencio al no encontrar justificación a tu partida.

Maratones de dolor se presentan en noches pálidas y frías, donde compito con la muerte para ver quién puede quedarse con tu imagen demacrada que es una epifanía poética para mí y para la muerte es un simple capricho mundano.

Ya la luna no me habla de tu partida y me hace buscarte en pieles ajenas, donde sigo sin encontrar tus lunares que me guiaban como la estrella polar a los marineros, solo quedan letras y olvido y por supuesto una soledad que no sé si seguirá siendo tuya o terminarás siendo tú mi soledad legítima.

Nuestras noches de lujuria se quedaron en un café frío de tus labios, ya la cuchara no gira tus miedos endulzados con tu sonrisa pero gira nuestro amor inconcluso, penurias en letras se mezclan en nuestro negro destino dejando un sabor a patria maldita y a triste despedida.​