El vómito del hombre.

Se acercan las Ofelias,
sin sus huecos pútridos,
sin el llanto que te viola la boca
al ahogarte.
¿De dónde salís?
Tan desdichada de estrellas muertas
que sólo colecciono constelaciones nuevas,
hinchada de niños puros
con sangre ingrata.

Diré algo más;
cómo haréis el camino
si queréis olvidar como andar
hacia un cielo egolatrado;
la soledad del astronauta muerto en el espacio.
Sin posibilidades,
sin aplausos,
sin el abrazo, sin retroceso, sin el alcance,
en lo mas virginal que es la honestidad
del aceptar lo que se es, de lo que se será.
Animales medio muertos,
fluyendo por la media muerte.
Al filo del camino.
El vómito del hombre
que se sabe del no volver.

 

que cierre tan profundo, haz creado una escena muy bueno pero lamentable,


grato leerla

 

Qué fuertes son tus líneas, no haces concesión alguna a las imágenes tremendas que describen el sinsentido y la soledad.
Muchas gracias por compartir.
Saludos desde México.