" la coneja "

La hermosa coneja la llevaron a la casa, llego en soleada tarde de un abril hace ya tanto, fue escogida en el mercado publico por su dueño y verdugo, como la describiría tal vez de patas largas buenos muslos, pelaje muy suave y blanco, era cuidada con esmero las mejores zanahoria, el monte mas suculento a diario le daban, no era un animal ordinario, era hermosa y blanca como la nube llego una tarde de Abril, un domingo a la calle logro escapar llevaba un hermoso lazo rojo al cuello y corría y corría, fue la envidia de muchas niñas por su hermoso lazo rojo tomo el sol comió de la mano de todos los niños de la cuadra y hasta en lunes el colegio conoció tubo días de libertad y inocente de su destino volvió a su dueño, pasado un tiempo muchos abriles supongo por cuentos de otros conocí que con vino y papas divina quedo.​

 

jeje pobre coneja fue grato leerte.

 

Ayyy que triste final el de la comeja. Buena narrativa, por lo menos le salieron apetitosa jajajajj que mala soy. ABRAZOS

 

Gracias Maripolis, momentos ya idos de la niñez que quise plasmar en algo corto y sencillo
un abrazo

 

Hola Rosa cosas que vivimos de niños con los animales que traían al barrio y la casa nos encariñábamos mucho y se transformaban en manjares culinarios
Gracias por leerme y comentarme

 

Hola caraqueña. Me ha gustado esta historia de la pobre coneja, contada con sabor. Aunque quizás pierda naturalidad si las tienes en cuenta, no puedo dejar de hacerte algunas sugerencias de puntuación (y de ortografía, por cierto).
Trataré de respetar tu estilo y ese ritmo fresco que le has dado a tu relato. Tú tomas, por supuesto, lo que gustes de mis sugerencias. Te hago notar que lo de «abril» y lo de «blanca» lo repites, puede ser para darle sabor coloquial, no lo sé.
un abrazo
jorge

La hermosa coneja... la llevaron a la casa, llegó en soleada tarde de un abril hace ya tanto... Fue escogida en el mercado público por su dueño y verdugo; ¿cómo la describiría?: tal vez de patas largas, buenos muslos, pelaje muy suave y blanco. Era cuidada con esmero: las mejores zanahorias y el monte más suculento a diario le daban; no era un animal ordinario, era hermosa y blanca como la nube. Llegó una tarde de abril, un domingo a la calle logró escapar, llevaba un hermoso lazo rojo al cuello y corría y corría, fue la envidia de muchas niñas por su hermoso lazo rojo, tomó el sol, comió de la mano de todos los niños de la cuadra y hasta en lunes el colegio conoció. Tuvo días de libertad e inocente de su destino volvió a su dueño... Pasado un tiempo, muchos abriles supongo, por cuentos de otros conocí que con vino y papas divina quedó.
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Hola Jorge: gracias por tu sugerencia las tomare muy en cuenta para próximos escritos siempre me ha fascinado leer poesía y prosa y claro escribirla pero soy un poco visual en mis recuerdos y como me van llegando esos momentos mágicos los plasmo algo muchas veces intimo entre yo y la vida que he vivido (muy rica y hermosa hasta ahora gracias a Dios) y me pierdo en las reglas del castellano y muchas veces en la narrativa, gracias de nuevo.
Un gran abrazo maestro

 

Amigo REVERENDO :
Primeramente gracias por leerme y comentarme mi escrito sucedió tanto en mi niñez con los animales y como niños no teníamos conciencia de la "cadena alimenticia" que grato es saber que eres de ese hermoso sitio TOLEDO tuve la dicha de visitarlo y quede enamorada algún día se que volveré por sus calles tristemente una semana antes de volver se me "extravió" la cámara y perdí todas las fotos pero me quedo España en el corazón! y de nuevo gracias por tus comentarios