La PRINCESITA

La princesita perdida de pronto hallo en su bolsillo un espejito con el que se obsesiono, se creyo sirena y nada tanto tanto tan lejos que empezo a ser imaginada por un marinero estupido y tuerto y al final de cuentas, ella, la princesita desheredada penso en su fortuna y se comio la uña de su dedo gordo del pie.
La princesita es mala gente decian los subditos deformes de todos lados del mundo, un dia una anciana vieja desde el principio le escupio al rostro a la princesita y la princesita nunca mas dejo de estornudar.
Que la vida es fea y que no nos merecen los que nos abandonan fue siempre cierto. Pero porque la lucha constante y el silencio en blanco y negro.
Ahora la princesita se mima solo cual mimo sin un unico oficio que silenciar tristezas, deambula ella, cree recordar el lugar exacto donde fue parida con dolor pero le duelen los ojos de pensar en como hara mañana para no suidarse.
Y cuando recuerda toda su vida, prefiera ser sirena cerebral, es decir prefiere ser imaginada con su larga cabellera aunque solo tenga tres pelos largos que peinar.
Pero jamas olvidaria la profundidad de sus palabras, la largura de sus silencios en los que me asesinaba mientras podia, alguna vez no le quedaran mas vestiditos en donde hallarse pero lo cierto es que la princesita tiene que venir a buscarme mañana y no estare pues la princesita es con mayusculas y yo apenas se vivir en cursiva.

 

Tu escrito me ha echo pensar que matamos algunos de nuestros yo, sin importarnos en convertirlo en pastillero y que muera de sobredosis ala. Me gusta leer y luego tener que pensar, un placer muy entretenido.
Un saludo.