Siete de junio...un día más.

SIETE DE JUNIO...UN DÍA MÁS.

Estoy comiendo, algo de pollo , hierbas verdes y una copa de vino. Veré que mas tendré que digerir. Que mas tendré que dejar que los ácidos destruyan para poder seguir sobre viviendo.

Noticias de este siete de junio y mi particular forma de verlo, o mas bien diría de sentirlo.
Ver, veremos todos los días, tanto, que acabaremos no sintiendo o sintiendo por momentos y olvidando en los instantes siguientes.
Mas cuanto bien nos haría, dejar que las cosas se graben a fuego en nuestro interior para no olvidar. Guardarlas en los desvanes de nuestra mente para rebuscar y hallar cuando llegue el momento y saber hacer lo preciso.

Nos empujan para volver a la normalidad, mas con una normalidad prudente. Pero me pregunto. ¿Cuando hemos sido esquivos a los abrazos, al roce del paisano, y a los besos del prójimo? Nos costará sal y miel derramada para no morir en el intento.

Suenan las alarmas de nuestra dormidera, ¡Es hora de salir grita el sereno! Los punteros se han quedado congelados, comienza el tiempo de la incertidumbre,. el tiempo de la prueba.

La historia dulce que nos hace el día agradable, es el nacimiento de los inocentes que ignoran el peligro de caminar entre esta raza...Sin dientes ya claman el alimento, sin moda ya claman por su abrigo...sin saberlo mantienen a muchos en un amante vilo.

Cierran sin piedad los sustentos de muchos. Se llenan las mesas de presentes lacrimosos, de futuros inciertos de pasados nostálgicos. Donde hijos tomaron los relevos de unos padres satisfechos...Legados inciertos, tiempos distintos, vidas en freno.

La claridad del día y los ojos nublados, nos miden los colores, almas negras dentro de pieles blancas, almas blancas dentro de pieles negras, el sol amigo y aliado ha causado los estragos de separar las conciencias. No se que decir, no encuentro argumentos para el odio...Supongo que es problema de nuestra raza, sangrarnos por pensamientos religiosos, por razas y colores distintos, por culturas que no entendemos. Todos iguales, mas todos tan distintos. Hecho de menos el edén, donde seguro eramos color arco iris, teníamos un mismo credo, o sea el amor por bandera, y donde la cultura era vivir…

Angustiosa es la montaña de escombros que a unos cuerpos amados no devuelve...aun son con penas llorados, insufrible es la incertidumbre de no enterrar sus pieles y dejar constancia cincelada en el mármol, donde acudir cuando la pena se haga insufrible.

Las nubes derraman granizos por algunos lugares, en otros el sol es extremo. Qué querrá, me pregunto, decirnos el cielo…

En fin...como esta realidad que escribo parece una historia de ficción,termino con ella. he escuchado en las noticias que, aun en las series se prohíben los besos..¡señores, de veras no lo lamento, no lamento la prohibición de los besos fingidos, lo que lamento es el ahogo de no dar los abrazos sentidos…

SHA.

 

Ciertamente, no es necesario verse inmerso en una pandemia provocada por un virus para darse uno cuenta que ya no puede regresar a aquel estado de "normalidad" vivido tiempo atrás pues, ya los besos no serán como aquellos besos, ni los abrazos como aquellos abrazos... Posiblemente ni las miradas sean aquellas, ni la caricias penetren la piel del alma.
No habrá ocasión de tropezar en esa escalera que subía al cielo desde la tierra (la distancia social ayudará a ello). Maldita distancia del alma que arrasó los frutos del huerto y las flores del jardín de aquel sueño de muñeca en manos de una niña... de soldado tras la cortina... de la casas grises y amores verdaderos...
Me alegra que el cielo siga destilando por tus labios y por tus dedos, Lirae.
Besos