Silvia

Mi alma llora esta noche por los que están solos.

Cuántos desconocidos parten ahora, que es siempre, hacia el olvido...En esta hora de luna, de rumor y sombra, en este seno de incertidumbre y nada ¿A cuántos escucho suplicar?

Me inundan presencias que no soy yo, historias que no son la mía, y en la sensación vaga de estar soñando, llega una oleada súbita de verdad, de horror...una angustia insoportable.

Si mi mente se preguntara por qué, ella no sabría decirse.

Todos esos relatos tristes, sus protagonistas...¡Si pudiera abrazarlos! Pero abrazo el aire, y me entristezco al acariciarme los brazos. Estoy solo, como ellos...como todos.

¡Solos de alma! Alejados de tenernos. Siempre por descubrir...Por descubrir.

Así miro a las estrellas, me sueño, ¿Habrá alguien que me conozca en verdad?
¿Existirá el testigo mudo de cuanto a acontecido en el infinito universo de mi ser?

Solo queda el silencio...

Conocí una chica que nunca ha sido amada. Que a cada paso que daba se preguntaba por qué. ¿Qué tenía ella que los demás no querían? Era tan bella y ella no lo sabía.

Al mirarse en el espejo veía unos labios por besar, unos ojos por alcanzar, una piel que nunca había sido acariciada...

Ella, a la que no querían, ella, que no se quería, se miraba y miraba, y veía como se desvanecía su estima, su rostro, su vida.

Y de su brillo fue quedando menos... Ahora ella vive en mí, y grita desesperadamente.

Como ella es toda la humanidad, hayan conocido el amor o no, si lo conocieron, fue un engaño. Una ilusión que tenemos los hombres de que volveremos a encontrarnos.

Pero no nos encontramos.

Como ella es el barbero, que no comprende por que los clientes esquivan su mirada,
o la puta, que cuando la pagan y la llenan se siente más vacía que nunca,
o la bienquerida que al mirarse en el espejo sabe que todo es una farsa...

Como ella el banquero, bajo el desprecio del cliente que le encasilla,
la camarera, que sueña encontrar al cliente que sonría y la roze la mano,
o el artista, que de sentirse tan poco desespera hacia la cima de la genialidad...

Como Silvia es toda la humanidad. (Tan bella y ella no lo sabía)