A la luna oscura

A La Luna Oscura.​

​

¿Dónde duermes luna oscura?​

¿Dónde duermes ya segura?​

​

Entre sueños invernales​

en los campos de glaciales, ​

escondida con astrales​

brillos que la luz fulgura.​

​

¿Dónde duermes luna oscura?​

¿Dónde duermes ya segura?​

​

Solitaria y confundida​

esperando mi partida,​

triste en cielo sin salida,​

anatema de amargura.​

​

¿Dónde duermes Luna oscura?​

¿Dónde duermes ya segura?​

​

Olvidada por el sol,​

ya perdida sin farol​

no me llega su crisol,​

luto eterno me captura.​

​

¿Dónde duermes Luna oscura?​

¿Dónde duermes ya segura?​

​

ANABIL CUADRA.​

​

 

Precioso e intenso tu poema un gusto leerte saludos

 

La luna no duerme, se esconde tras su complice la noche, juntas hacen travesuras, ayudan a los amantes a regocigarse de caricias y besos...
muy bonito poema romantico.... yo siempre me considerado amante de ella.

saludos poeta

 

Gracias por tus comentarios

 

Hermosos tus versos Anabil, un gusto leerte de nuevo.
Saludos cordiales para ti

 

Curiosa estructura la que presentas en este poema Anabil, o al menos yo no la conocía. Comenzando con un pareado que se va repitiendo tras cada estrofa cuyo último verso rima con dicho pareado y el resto de los otros tres son monorrimos distintos en cada estrofa. Tiene una gran musicalidad y a mi me suena como una hermosa canción infantil. Mis felicitaciones.

Un abrazo.

 

No conocía este tipo de poema cuyo eje central es un pareado que se repite y con estrofas rimando entre sí los tres primeros versos y el cuarto con el pareado. Cuando me respondas, ilústrame sobre el nombre que se le aplica, por favor, que me gusta ir avanzando en mi conocimiento sobre la clásica.

Te inspiraste en sensaciones de oscuridad y frío, de firmamento negro, insondable, y casi pavoroso. Me evocaste un sol negro, luna negra, vacío absoluto, silencio, casi, casi, una imagen de Universo expandido hasta límites insospechados cuya temperatura está rayando el cero absoluto, y perdida la esperanza de que se vuelva a contraer en un latido que dura 200.000 millones de años (o más aun) hasta concentrarse en una nueva singularidad de la surja un nuevo bing-bang.

Mis estrellas, querido amigo, pero éstas, brillan con fuerza, muy lejos de ser pequeñas bolas de neutrones, y sus luces siguen iluminando los senderos cósmicos.

Un fuerte abrazo.