A la persona que un dìa fuì...

A la persona que un dìa fuì:

Querido extraño
vista alzada
pensativa estatua
ojos cafes.
Tras noche cafeìna
cambiaste tu alma
y te dejaste llevar,
manchaste tu piel de ternura
y no te dejaste escapar.

Volaste, lejos de tì mismo
caìste, en la depresòn
ahora, no puedes vivir sin estar enfermo
de los cariños que no tienes
ni veràs venir jamàs...
No era justo ni
tan necesario escapar.

Le echaste la culpa al destino,
por sus infortunios premeditados
¿Pero no era acaso tu culpa?
y sin reales males
te dejaste afectar...
Pobre poeta echo añicos
por lo que nunca estubo mal.

¡En la vida hay que aprender!
No dejarse afectar por el resto,
pero ahora herido,
no hay màs final que el ya visto:
Para la persona que un día fui,
¡No te rindas!
No te dejes abatir,
que aùn queda mucho camino,
y caminarlo es tu destino,
por la vida seguir.



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Dedicado a un amigo, Javier.