A MI HIJO

CUANDO SE EMPIEZA
A CONVERSAR CON EL ALMA
SIEMPRE HABRÁ UN JARDÍN
DONDE REFRESCAR EL CORAZÓN
Y DESCANSAR LA MIRADA.

DÍAS VENDRÁN HIJO MÍO
CUANDO LOS AÑOS TE ENSEÑEN
SUS MANOS CANSADAS
Y ARROPEN SUS LUCES
CON MESURADA VERGUENZA
PORQUE NO DESTELLAN
CON LA SONRISA DE SUS MAÑANAS PRIMERAS.

ENTONCES VENDRÁS AQUÍ
Y TE ENSEÑARÉ MIS FLORES
QUE AUNQUE MENUDAS Y TIERNAS
LLENARÁN CON SU AROMA
LA VERDAD DE TUS LABIOS
LO PROFUNDO DE TUS SUEÑOS
Y LO FUGÁZ DE TUS PASOS...
PARA ENTONCES MIS FLORES
SERAN TODAS TUYAS.

 

Ader,
bella reflexion en tus palabras fue un placer navegar en tus versos!

Abrazos,
Guadalupe

 

gracias por tus palabras ader