A veces llegan cartas... a veces llegan tarde

Doña Elvira se enfermó de cancer y la enfermedad maldita se la estaba llevando
a jirones... pero ella tenía un secreto y no quería morirse todavia.

Laura y yo nos quisimos mucho, eramos solo dos chiquillos... pero quien hizo las reglas?
Yo pensé por muchos años que ella había muerto, pero nunca logré olvidarla.

Leticia me mandó un mensaje... me dijo que su mamá estaba muy mal y que quería verme.
yo hice el viaje para despedirme de ella y quizas para desearle que muriera en paz.
Nunca habiamos tenido ningun problema, en realidad ella fue buena conmigo siempre
y era muy amiga de mi familia, especialmente de mi mamá.

Laura y yo fuimos juntos a muchos lugares... ella fue mi primer amor, mi primer beso,
mi primera vez.. y yo fui de ella su primer todo... ella me amaba y yo la adoraba.
A nuestros quince años eramos muy felices y soñabamos con un futuro hermoso.
a nuetros quince años no pensabamos en consecuencias
y nos amabamos absolutamente sin prejuicios
y Leticia nos admiraba, y mi madre nos reñía
y doña Elvira nos juzgaba.

A Leticia le dio mucho gusto verme ahi afuera de su puerta y se le humedeció
la mirada cuando me invitó a ver a su madre en su lecho de muerte.
Ya casi no tiene fuerzas me dijo quizas no logres entender lo que te diga,
saludala mientras preparo la merienda... tenemos tanto que platicar.

Doña Elvira era una mujer reservada siempre, muy pocas veces habiamos
hablado de algo serio o importante, pero esta vez se puso contenta de verme ahi
al lado de su cama y me pidio que me sentara y yo tomé su mano
y la apreté entre mis manos... sentí la ausencia de calor como si de verdad
ya estuviera muerta.
Primero me dijo. "Siento mucho lo de tu divorcio"
crei que tú y tu esposa eran felices. Todo se termina le contesté ,
especialmente las cosas buenas. Estaré solo por un tiempo
y quizas un dia me encuentre otra esposa...
una que no duela le dije con un poco de sarcasmo.

Cuando Laura y su familia se fueron de viaje en esas vacaciones de verano
yo estaba en el rancho con mis abuelos y no me di cuenta que se habian ido.
Por eso cuando regresé y me dijeron del accidente, no podía creerlo...
Laura había muerto y la enterraron en Tampico, cerca del puerto.
Yo sentí que moría ahi en ese momento, no era justo, ella me quería y yo la necesitaba...
en ese momento, el futuro hermoso que habiamos soñado se derrumbó completamente
convirtiendose en una pesadilla para mí y en un tormento para mi familia.
A mis dieciseis era ya un hombre con el dolor y el despecho que causa
el haber perdido el amor de mi vida... Leticia lloraba conmigo
mi madre me comprendía... doña Elvira me evitaba.

Leticia tocó a la puerta antes de abrirla y entró con un vaso de agua para su madre
y un vaso de limonada para mí; se veía contenta, su madre también se veía
algo contenta... aun en su enfermedad.
Trae una silla y sientate hija le dijo Doña Elvira,
quiero decirle a los dos una historia que he guardado muy secreta y que ahora pienso que deben saberla.

Cuanto quisiste a Laura? La pregunta fue directa.
Primero no supe que contestarle y me quedé callado;
me cayó de sorpresa...despues de todo lauara había muerto hacía muchos años...muchos.
Encerré a leticia en mi mirada y dije muy despacio como que no queria que me escucharan.
La adoraba... la amé con mi vida y ceo que una parte de mí se murió con ella.
pero porqué pregunta?
Porque laura no murió en un accidente.
Laura se murió de tristeza unos meses después de dar a luz a tu hija... eso es lo que te quería decir.
Varios años después de que te habias ido al norte,
una mujer llegó a nuestra puerta buscandote, me dijo que traia un mensaje para tí de parte de Laura.
segun ella la conoció durante el embarazo, Laura se habia puesto muy enferma
y nadie le pudo ayudar a encontrarte, porque sus padres te odiaban
por haberle robado su inocencia y por haberla embarazado.

Casi no podia escuchar lo que estaba oyendo era como si la muerte se estuviera
otra vez burlando de mis sentimientos... Yo nunca le hice un mal a nadie.
solté su mano para secarme una lágrima... Leticia estaba con la boca abierta,
sin creer tampoco lo que oía.
Cuando llegó aquella mujer buscandote, traía con ella una pequeña que se llamaba Rocío
y que segun ella es tu hija, hija de Laura. Y yo le dije que era mejor si no te enterabas
porque tú ya te habias casado y eras muy feliz en tu vida
y que aparte tú sabías que Laura se habia muerto en un accidente...
aún asi, me dejo la carta que Laura te habia escrito, la he conservado todo este tiempo...
Tienes que perdonarme.
Tu propia madre me dijo también que era mejor asi; que nunca lo supieras;
pero ahora que estoy al borde de la muerte, no puedo mas callar mi conciencia.

Ahora por favor dejenme sola... me siento muy cansada.

Debimos haberla buscado me dijo Leticia con una lágrima.

Hace veinte años ya que murió doña Elvira... La carta de Laura y de Rocío
aun esta por ahi escondida...
Nunca he podido entender porque algunos humanos
tratan de arreglarle la vida a los demas sin darse cuenta que la hacen mas complicada;
mi madre no aceptó que ella sabia... pero tampoco lo negó.

Sempiterno

 

Interesante tu retórica en las prosas Gustavo, se lee con gusto tus narraciones. Saludos cordiales.

 

Gracias Maldonado... por regresarme.