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Adriana

Tema en 'Prosa: Generales' comenzado por esteban7094, 29 de Abril de 2014. Respuestas: 0 | Visitas: 228

  1. esteban7094

    esteban7094 Poeta recién llegado

    Se incorporó:
    29 de Abril de 2014
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    Género:
    Hombre
    Aparecen unos pilares de oro en un trasmundo escondido y las trompetas suenan y el León ruge desde el olvido; y los ángeles apenados susurran: -¡Adriana! ¡Adriana! ¡Si pudiéramos nosotros tu llanto menguar!

    Se alza la luna en su carro de seda, se alzan las estrellas con su salmo trémulo y fulgente; y giran como en un vórtice fatal. ¡Ay rosas de Olivia! Que guardaban en su rocío lágrima y dolor. ¡Ay caricias profundas de Hermilda la virgen! Que eran como mirlos que incitaban a volar. Y los ángeles apenados susurran: - ¡Adriana! ¡Adriana! ¿Qué es lo que buscas en este soñar?

    Y la aurora se desvanece como se desvanece el amor; y las velas taciturnas se ondean por el céfiro inclemente de Dios; y el navío del tiempo vuela y se hunde y navega en la vasta mar; y los ángeles apenados susurran: - ¡Adriana! ¡Adriana! ¡Tu hijo aún no se encuentra en este altar!

    Y se entronan dos santas desde un nuevo ensueño y claman himnos de esperanza ante una sombra mortal. Pero desde el cielo cae la gracia del dolor y y la alegría: ¡melancolía! ¡bella melancolía! Y se escucha el bullir de una lágrima diamantina mientras los ángeles apenados susurran: - ¡Adriana! ¡Adriana! ¿No sabes que la tormenta y el vino no permitan olvidar?

    ¡Ay, ay! Se alza un silencio álgido en el recinto, como una muralla grísea de aflicción. Pero la noche, cual terciopelo de lises que enciende los mares de magna pasión, también vida es; ¡no sólo muerte, no sólo sombra! Y la magia y lo divino y lo sublime caerán desde la apoteosis del cielo purpúreo y un hálito afable de oros ungirá el sollozo de la madre; y florecerán de nuevo los rosales de Olivia mientras los ángeles apenados susurrarán: - ¡Adriana! ¡Adriana! ¡Tu hijo ya se encuentra en este altar!


    L. ESTEBAN TORRES
     
    #1

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