Ahora soy olvido.

Mis preguntas sobran a tu olvido sublime.
Añoran mis represalias para hacerme guirnaldas en la cabeza,
tantas veces como sea posible,
y así,
ser como la navidad invisible sin ti.

¡Llora mi alma por ti!

Soy sola por infortunio...
Abandonada a mi suerte, y lo peor,
sin la explicación de mi alma
que hacerte llegar, no tuve suerte.

Mis plegarias sobran también a tu olvido sublime.
Y sendos golpes me doy en la cabeza,
recriminando este atraso en el tiempo de tu tiempo,
que fue mi tiempo,
en el ayer de mi enfermedad
tan triste.

Para ti..
ahora soy olvido.​

 

Muy sensibles y sobrecogedores versos querida amiga... qué ha sucedido?... recibe mi abrazo con todo mi cariño!!
Nancy

 

¡Mi Divina florecilla al fin te encuentro!
Me da mucho gusto saberte escribiendo, la poesía siempre será un excelente medio transmisor de nuestro sentir.
Espero y deseo estés muy bien ¡Bendecida!

 

Hay fríos. Hay etapas. Hay letras y almas mágicas...