Al límite del aliento

En un absurdo cada vez más evidente corro
al límite del aliento, alas en los pies entre
chopos centenarios coloreando de verde
un pedazo de cielo.

No tengo prisa, pero sí ganas de llegar al
sitio de las caricias indefinidas en el libro
de los amores, ésas a las que hay que
buscar nombre para poder hablar de ellas
sin equivocar el prodigio nacido de su
simple existencia.

Puede que allí me encuentre con una piedra
de rostro azulado, una lágrima de nácar
o la brisa que mueve las plumas de un ángel
que vuela sobre la plata del mar.

En un absurdo acogedor me instalo voluntaria
y felizmente para correr sin aliento, aunque
no tengo prisa por llegar.

 

"Prefiero más que llegar..."

La prisa es solo una muestra... y sin embargo no es la conquista.

Buenas líneas Susi. Dejas tema para que me entretenga el pensamiento.

Un abrazo.

 

ayy susi, que sitio tan perfecto has elegido como destino y aunque no hay prisa, seguro llegaras.

Besitos

 

Siempre atento al mensaje, amigo César. Dicen que lo interesante no es la meta, sino el camino recorrido. Gracias por tu apoyo, poeta.

 

Jajajaja no puedo evitar que me alegre tu imagen, Damar. Por cierto, cuánto tiempo que no te veía por aquí.
Muchas gracias por tu visita y comentario, amiga de la lírica, la belleza y de ti misma (eso siempre me gustó).

 

Susi, de nuevo me postro ante ti y ante las caricias carentes de nombre, que sin duda son las mas hermosas, comparto tu prisa invertida y al borde del plagio...Me quedo sin aliento.

 

Yomboky, no estoy al borde del plagio, sino inmersa completamente en él jeje... bueno, yo creo que más bien es un homenaje a una cierta ola que creció para que la viéramos incluso desde nuestro tiempo.
Encantador tu rollo, amigo. Besos para los tres.