Alguien me quiere muerto

Alguien me quiere muerto ​

alguien que inmortal flota,
y por las paredes hormiguea
con sus dientes morados.​

Alguien me quiere muerto ​

después de no tener vida
justo cuando ya no me levanto,
y estoy ido de mis asaduras.​

Alguien me quiere muerto ​

tan muerto como muerto,
en la ruta de la muerte;
con su lluvia, con su tiniebla.​

Alguien me quiere muerto ​

cuando ya no puedo vivir
cuando roto el cuerpo no anda
y se queda para morir.​

Alguien me quiere muerto ​

me quiere empapado de sin vida,
en el momento que ya dejé de existir,
y me perdí en el olvido​

Alguien me quiere muerto ​

cuando mi muerte vivo,
y la vivo tan muerto.​

​

 

Pues a mí, me quieren mucho.
Entonces, la diferencia entre ambos vocablos, es patente.
Pero ambas palabras empiezan por la letra M.
Luego por tanto, no confundamos.





No es lo mismo fumar tabaco, que que el tabaco te fume a ti.
Como tampoco es lo mismo beber Whiskey, que que el Whiskey te beba a ti.
O sea que no es lo mismo un encaje negro de un metro, que que te la encaje un negro, un metro.





Debemos ponernos en causa, y no en efecto.
¿ Por qué empecé a fumar ?
¿ Por qué empecé a beber ?
¿ Por qué me hice sastre ?





¡ Frenos ! Para tomar las curvas, con mayor holgura. Sin prisa, pero sin pausa.





Todo tiene su porqué.
Incluso ¿ Por qué crear ? Y por qué no.