Antiguos niños

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Allá están... Perfumados con algún ramito de lavandas y casi siempre con alguna rosa seca guardada en algún libro. Practicantes acérrimos del lenguaje y de las formas. Habitantes de la paz. Amaneciendo en algún lugar de las sonrisas.

¡Haz la prueba! Siempre tienen un dulce en los bolsillos o en la cartera para regalarte.

Yo los he visto descender mi calle y perderse en algunas iglesias, en las bibliotecas, en los graneros, en los plantíos, en las plazas y donde quiera que los niños hacen volar cometas. Los he visto sonreírle a la muerte, como arrullándola. Los he visto sonriéndole a la vida, como amando la tarde. Al igual que las aves, pocas veces o quizás jamás encuentras el lugar donde han caído.

Quizás son como globos que de tanto en tanto se van al cielo.

Detenido a medio del verde y de la arena, bien comprendo que deseo una fe como la de ellos, capaz de asistir al milagro de lo cotidiano con la inocencia de una mariposa que sólo vive un día.

Y que adhiero a esta segunda instancia de la infancia como si fuera el estado final de todas las caricias, de todos los soles, de todas las esperas, de todas las sonrisas.

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Danieluchito
Te leo y me recuerdo de mis abuelos: Florcita y Francisco, los padres de mi madre, còmo eran aquellos tiempos, ellos parecían dos niños grandes, mi abuelo siempre tenía alguna golosina para nosotros, mi abuela preparaba los potajes más ricos, se sentaban a leer el periòdico y recibían con tanto cariño a sus "compadres" que cada fin de semana llegaban de los alrededores a la misa del domingo...mi abuela con sus ojitos claros y su sonrisa amplia, mi abuelo con su sombrero y su voz fuerte y apacible...los dos han sido para mí un ejemplo de amor, ellos encontraban en las plantas, en el traquetear de los caballos del pueblo, en los peces que caían en las redes, una alegría constante....
gracias por esta narrativa que me ha llevado a mis propios recuerdos...bellisima.
Te dejo mi cariño grande y mis felicitaciones por tu pluma sensible, amigo sublime y tierno.
Ana

 

Me complace enormemente obsequiarte con el ejercicio del recuerdo. Me honra siempre tu visita en mi humilde espacio de letras, Anuchita. Te abrazo. Daniel

 

Me complace enormemente obsequiarte con el ejercicio del recuerdo. Me honra siempre tu visita a mi humilde espacio de letras, Anuchita. Te abrazo. Daniel

 

Hermoso Daniel!!!
Esta entrega es un plantío dulce que llega al alma....
También los he visto y cuando pasa, quedo en silencio, admiro y callo, sonrío y me deleito...
Una belleza querido amigo esta prosa, celebro haber llegado a su aroma!!!
Un abrazo y todo mi cariño Daniel..
Camelia

 

Cuanta ternura, Daniel. Qué bien que me hace encontrame con tus letras, leerte siempre es una bella caricia. Gracias.

Un besote, vecino.

 

Camelia... Me honras tanto con tus comentarios. Me llenas de cariño. Gracias bellísima amiga. Daniel

 

Gracias Sandrita. Es un verdadero deleite encontrarme con tus marquitas dentro de mi espacio. Eso es una caricia. Te quiero. Daniel

 

Querido Daniel, no imaginas lo emocionada que estoy, hasta las lágrimas te he leído tres veces con esta y no me canso, un escrito como solo tú puedes regalar, con la ternura y transparencia que llevas en tu alma, gracias por esta entrega maravillosa sublime, magistral, no se si el sistema me lo permita pero mereces rep, si no tienes mi cariño y admiración mi ángel de luz, te quiero mucho amigo bello y (te extrañado por estos días, me han hecho falta tus luces) la música que has puesto es simplemente una delicia, sigo emocionada, abrazos pincoya

 

Querida amiga, tu emoción es mi preciada Repu. No más.
Abrazos desde el otro lado de las montañitas.
Gracias por tu bondad infinita. Te quiero amiga mía.
Daniel

 

Esa dulzura y carisma especial de tus líneas
trasmiten esa deidad por el niño interno que por siempre
prevalece en ti y en cada palabra escrita...
no dejes de plasmarlo y de sentirlo nunca.

Mi admiración y respeto a tu talento Daniel
mis acostumbrados aplausos desde aquí...


Besos