Buscando el poema de mi vida

Quisiera que este fuese el poema de mi vida,
el poema inolvidable,
que viaja el mundo en todos los idiomas…
El poema que, cuando yo no esté,
nunca falte en cualquier antología.

Así piensa el poeta que ama la poesía.
El poeta que pone el alma en cada verso,
aunque nunca gane nada,
aunque pase la vida esperando el milagro,
como quien espera la suerte de ganar su lotería.

Mas, al final de sus días,
el poeta de cada noche,
el incansable poeta que escribe y escribe,
pensando que quizás mañana será el gran día,
se detiene por una vez y mira al pasado,
y solo ve poemas y poemas,
que no están en ninguna antología.

Dolorosa realidad la del poeta poeta,
que ha dedicado gran parte de su existencia,
a crear una música que a ningún Director
le fascina,
sin comprender quizás,
sin valorar tal vez,
que ante sus ojos cansados,
y su pluma ya vieja y vacía,
se encuentra hoy la obra de su vida.

Frank Calle (7/ feb./ 2021)

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Maravilloso!!! como todo lo que hace estimado poeta, mis respetos en un abrazo de colores,

 

Gracias Guadalupe, muy amable y muy expresiva.
Después de regresar de mi encierro por COVIC, hospitalizado por más de 12 días, cada mensaje o comentario que recibo me llena de inmensa alegría. Fueron días muy difíciles, penando por mi esposa, también contagiada, y separados por su estado, en hospitales distantes, contactando solo por correo. Muy duro.
Ella aún sigue internada, pero ya va en franca recuperación.

Un abrazo,

Frank
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Quizás ya lo hayas escrito mi querido Frank, no estará en una antología, pero
seguramente lo tendremos en el corazón los que disfrutamos de tus letras. Me
complace verte ya recuperado y compartiendo en el foro. Por favor dale a tu
esposa todo el cariño de mi parte y mis deseos de su pronta recuperación.
Besitos cariñosos apretados en tus mejillas.

 

Gracias Anamer, eso intento. Ella ahora está por fin haciendo quehaceres, pues desde el regreso casi no se ha levantado.
Nunca sabremos si hemos alumbrado esa obra que llevamos dentro. Dichosos los que llegan a conocerlo y disfrutarlo.

Mil gracias,

Frank
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