Carbúnculos negros.

Tus ojos negros, bellos

cual si fueran Carbúnculos oscuros

fijos Bajo tus cejas;

Iluminasen como extraviados luceros,

tintineando en tu frente, tu horizonte.

Los he vistos encendidos casi saliendo.

Tu pupila brillante.


Mírame, ojos de rubí ennegrecidos.

Mira a mis ojos de cristal celeste,

no los ocultes ni me los niegues.

Mírame, como si fuera tu reflejo.

Sonríes más y más...

brillan tus ojos negros.​

 

Los ojos son el espejo del alma... Un abrazo Jhon Mario!

 

Mirar, para pasar el día, juntos, como dos gotas de agua.
Está bien.
Las lágrimas se parecen mucho a los hombres.
Porque el hombre es como una perla, o una flor.

 

Gracias por visitar y dejatr el comentario.
abrazos.

 

Una imposición que traerá como consecuencia una intensa atracción cromática...y seguro algo más. Saludos cordiales para ti jhon mario.

 

Intensa ya es la magia que esta surgiendo.
Gracias por tu visita.