Carta a quien no supo cuidarme

Sé que no hemos hablado en mucho tiempo y no hemos sabido nada el uno del otro, solo que hoy me encuentro con la necesidad de decirte tantas cosas.
Sí lo que querías era enamorarme lo lograste. Poco a poco fui cayendo en el engaño de que era algo sincero, que no ibas a usarme, que no era una más. Volver atrás y evitarlo, quizás eso hubiera Sido mejor, en vez de darme esa oportunidad de quererte.
Tal vez solo jugaste y perdiste el control de tus mentiras. ¿Que se siente decir te quiero sin sentirlo?
Lo que tengo es impotencia, saber que jugaste a querer y te retiraste al ver que perdías.
Puedo entender que te hayas cansado de mi, o tan solo deje de gustarte y quisiste buscarte en otros ojos. ¿Pero porque no me dijiste que eso era lo que querías?
Me usaste y te alejaste buscando la excusa perfecta de que querías hacer las cosas bien. Cuando, en realidad, ya habías visto a otra.
Me tuviste en la incertidumbre, otra vez, dejando un hilo de ilusión en mi, pensando que volverías.
Yo ya se lo de ella, y entiendo que te haya gustado. Me lo esperaba.
Recuerdo como la mirabas desde la primera vez que salimos juntos. Lo supe todo desde un principio.
Cuando me pediste tu "tiempo" ya me imaginaba las razones.
Lamento que hayas visto en mi un simple juego en donde podés empezar y terminar la partida a tu gusto, retirarte a tu manera, jugar tus propias reglas.
Creíste que podías entrar y salir de mi vida cómo querías y eso hiciste; y si estaba rota por dentro lo único que lograste fue romperme más.
Hay tanto que me recuerda a vos, y se que me va a costar olvidarte. Pero ya no quiero verte, por favor. Porque yo no soy comodín de nadie, no soy una más. Aunque eso hayas hecho de mi.
Sí, rompiste mi corazón y es la primera vez que lo hacen. Pero si no lo hubieras hecho, no me hubiera dado cuenta de lo que merezco, y estar al lado de una persona, que a fin de cuentas no me valora, eso hubiese sido peor.
No vale la pena querer volver el tiempo atrás, porque ahora tengo que seguir para adelante.
Te deseo lo mejor, claramente. Ojalá algún día aprendas a cuidar los sentimientos ajenos. Porque si estarías en mi lugar, creeme, no te gustaría.
Espero no verte ni cruzarte en mi vida nunca más. Así va a ser más fácil cerrar mis heridas.

 

Triste carta donde las heridas quedan expuestas, pero también el deseo de seguir adelante y olvidar a alguien que sin duda no merece ser recordado...

El amor debe ser siempre sagrado, cuidar a quien se ama incluso más importante que nada.

Me gustó lo leído, pese al tinte nostálgico.

Cordial saludo.